El corte pixie es una tentación para muchas. No todas se animan, pero créanme: es un viaje de ida. Una vez que se decidieron por este corte, ya no vuelven al pelo largo. Desde hace más de 6 años que lo tengo y, salvo alguna que otra crisis capilar -casi siempre debido a ver peinados espectaculares con trenzas-, mi decisión es firme: no vuelvo al pelo largo.
El post de hoy es para ayudarlas a decidirse, sobre todo desterrando mitos. EL punto principal es el miedo y las preguntas: ¿ya estoy grande para un pixie? ¿tendré la cara/personalidad para llevarlo? ¿qué van a pensar los otros? ¿me van a empezar a llamar Carlitos?.
- La primera respuesta es "no sean boludas bobas". Si les gusta, haganlo. Lo importante es que uds se sientan seguras y cómodas con el corte. Siempre habrá algún inseguro de si mismo que para sentirse superior tenga que rebajar al otro burlándose de su corte de pelo... pero seguro que lo hace con un corte pixie, un rubio como el de Susana Gimenez o lo que sea. Si no quieren arriesgar demasiado, vayan de a poco: primero un corte bob y a partir de ahí, van cortando cada vez más. Cortar un pelo largo directo para un pixie puede ser traumático. Yo lo hice una vez y reconozco que el shock casi me hace salir a comprar una peluca (a los dos días me enamoré de mi corte, pero recuerdo haber derramado algunas lágrimas).
- Tampoco es necesario tener un tipo de rostro especial para tener un pixie. Este tipo de cortes tiene muchas variantes que pueden adaptarse a todos los rostros: bien corto, con flequillo, con volúmen arriba o en los costados, etc. Un buen estilista va a encontrar el pixie perfecto para nosotras. Lo que es muy importante para optar por este corte es tener es una muy relación con nuestra cara. No importa si tenemos una nariz gigante (¡hola!), sino aceptarla y mostrarla con actitud: el pixie destaca la cara, pero ésta no tiene que ser perfecta. Con un corte así no se puede ocultar nada.
- Aunque no lo parezca, el pixie es un corte muy versátil: con él se puede jugar mucho, cambiarlo constantemente. Un día pueden llevarlo con vincha, otro con mucha cera para generar un falso mohicano, otro día con efecto mojado, un pompadour. En Pinterest van a encontrar mil variantes de peinados para cortes pixie. La cera, el fijador, un voluminizador y la imaginación son los mejores aliados.
- El mantenimiento es un tanto engorroso: una vez por mes hay que retocarlo. Lo mismo pasa con la limpieza: de tanto producto que se le coloca tiende a ensuciarse más rápido. Pero el lavado y el peinado son lo más simple del universo. No es necesario acondicionador ni tampoco grandes conocimientos de estilismo para darle forma.
- Si se aburren y quieren volver al pelo largo, les aviso: será un camino édem. No es fácil dejar crecer un pixie. Más de una se aburre, otras nos damos cuenta que ya no toleramos el pelo en la nuca o lo hombros.
- El juego de los opuestos femenino/masculino, adulta/niña, nerd/punk es algo con lo que se puede jugar. Los labios rojos y un corte de pelo bien corto son la mejor combinación (a mi parecer). Me encanta la idea de llevar un maquillaje hiper femenino con este corte pixie y un boyfriend jean.
Por último: sé como es el tema del simbolismo del pelo largo y la sensualidad. Hay personas que no asocian pelo corto con femeneidad, pero la verdad es que el pixie obliga a ser femenina. La sombra de ser llamada Carlitos existe y nos exige ocuparnos de nuestra vestimenta e imagen... lo que no me parece nada malo.
Y para terminar con mi apología al pixie, les dejo algunos tips antes de ir a cortarse el pelo:
- Miren muchos cortes en Pinterest y busquen actrices/modelos con facciones similares a las suyas y miren su corte: cómo lo llevan, cómo lo peinan, cómo se maquillan.
- No tengan miedo de ir al estilista con una foto de esa actriz. Es importante guiar a quien nos va a cortar el pelo sobre el estilo que quieren (más grunge, punk, naif, nerd).
- Vayan a cortarse el pelo levemente maquilladas, nunca a cara lavada.
- Exijan al estilista que les enseñe trucos básicos de peinado: qué cera usar y cómo, por ejemplo.
- Antes de correr a comprar una peluca, esperen uno o dos días. El shock inicial es fuerte, pero se pasa.
- Y mi mantra personal cada vez que un corte no termina de cerrarme (me ha pasado mil veces) es: EL PELO CRECE.
¿ya las convencí?