Tu vida está en mí, y ya no te siento, pero porque estás en mí.
En mi corazón, pero también en mis huesos, y en mis heridas, y en mi historia.
En mis células, con sus pliegues, y su piel. Sus vinos y cenizas. Su fuego y su candor.
Contigo. Hasta el final.
Feliz aniversario,
01.05.2009