Anna Starobinets: Refugio 3/9

Publicado el 30 octubre 2015 por Libros Prohibidos @Librosprohibi2

Título original: Убежище 3/9
Idioma original: Ruso
Año: 2011
Editorial: Nevsky Prospects (2015)
Género: Fantástico
Valoración: Recomendable

Algo tiene Anna Starobinets. Algo tiene para que lleven hablando de ella en mis redes sociales tanto tiempo, sin que sus características sean las habituales (rusa, autora de género, editorial pequeña). Ya hacía tiempo que tenía ganas de averiguar qué era exactamente aquello que traían los libros de esta señora, y su última novela editada me lo ha dejado bastante claro. Hoy es el turno de Refugio 3/9.

Pocas sinopsis he visto que aúnen mejor el contenido de una obra que la que tiene este libro. Habla de desintegración familiar, de cuentos de hadas, del fin del mundo, de mitos rusos. Y eso es un pequeño compendio de lo que nos encontramos aquí. Starobinets nos presenta a Masha, una chica que se encuentra mal, ojalá poder saber qué le pasa a ella y qué le pasa a todo el mundo que la mira raro. Y de forma paralela, un niño. Bueno, no, el Niño. De buenas a primeras nada tiene sentido, no hay conexión entre las tramas, no vislumbras nada lógico aunque estás disfrutando, eso lo sabes. De pronto hay una conexión y la autora empieza a hilar todo lo que había, de manera que lo que eran puntos ahora es un mapa enorme. Un mapa conformado por dobleces en la realidad, bosques y surcos en los que no hay más que misterio. También por narraciones que se anticipan a otras narraciones y que cambian tu perspectiva de la novela por otra distinta cada dos páginas, porque Starobinets se lo ha montado de tal manera que nada de lo que parece tener sentido sea en realidad tan fácil. Lo que parece a simple vista nunca es así como te lo pintan, y los mundos están ahí para ser unidos. No os voy a engañar (y perdonad que sea basta): Refugio 3/9 es raro de cojones. Incluso cuando comienza a cobrar sentido, a la hora de dejar la lectura una se plantea qué es lo que está leyendo, qué está pasando aquí, por qué tan extraño, por qué cosas tan inconexas temáticamente encajan tan bien en una novela. Fantasía, realismo mágico, maravilla. Todo en uno.

La escritura de Anna Starobinets es muy buena; su manera de describir me ha parecido fascinante y aterradores los elementos. Narra de manera muy abrupta, sugestiva, los personajes son interesantísimos y su presentación y paralelismo entre las tramas admirable. Va hacia atrás y hacia delante en el tiempo sin ningún aviso aparente y sin embargo te das perfecta cuenta de lo que ocurre (bueno, esa es mi teoría, la verdad es que podría ser todo lineal en una temporalidad distinta a la nuestra, porque esto es ficción y vete tú a saber qué secuencia temporal hay en este mundo). El caso es que esto de la temporalidad me ha puesto un poco frenética, porque a la hora de contarte ciertas cosas, la narración se va acelerando o estirando de manera que la tensión se acumule o se suelte a lo bestia. La autora estira al infinito la primera escena del Niño, donde vemos que va a llegar la catástrofe pero no termina de llegar, y aquello es un infierno (muy agradable, todo hay que decirlo). Y la secuencia de las noches de la enfermera jefe están contadas de una manera tan acelerada que madre mía, menuda manera de agobiar al lector y de transmitirle lo que está sintiendo el personaje en ese mismo momento. Y cuando es Aquel que Cuenta el que narra historias pequeñas, la perspectiva del Niño es la nuestra: somos el Niño, de alguna manera, asistiendo a las historietas y sintiendo el mismo pánico que él. La primera parte del libro, magnífica (creo que queda claro que considero Refugio 3/9 una lectura buena de principio a fin, pero por si acaso: sí), es un juego de personas narrativas muy interesante y de pérdida de la identidad perfectamente encajado.

Además de todo esto que os comento, cuenta con el aliciente de tratarse de una novela terriblemente entretenida, en cuyas páginas es difícil dejar de pensar, que se disfruta muchísimo. Lo único negativo que considero necesario mencionar es alguna que otra errata tipográfica en una edición por lo demás sobresaliente (yo no menciono las portadas nunca, pero ¿a que es bonita la portada?). Se lleva la etiqueta Recomendable; puede parecer poco enérgico, sin el “muy” delante, pero es un libro que merece mucho la pena y os recomiendo. Ya tengo ganas de leer otro de la autora.

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