Anorexia y bulimia a los 40

Por Lafemmeaux40
“SIEMPRE JOVENES Y HERMOSAS”

Una frase que vemos y escuchamos constantemente, imágenes de mujeres de 30, 40, 50 o 60 , bellas, radiantes…. nos venden productos que nos harán perfectas, alimentos que nos quitaran el hambre o equivalen a un plato de paella. Cumplir correctamente todos los roles que hoy la sociedad nos asigna: ser eficientes amas de casa , buenas madres y parejas, tener éxito laboral y mantener la buena presencia a cualquier precio. Este nivel de exigencia lleva a que muchas de nosotras vivamos pendientes de lo que debemos ser, más que de lo que desearíamos,  poniendo por delante la imagen del éxito que esperamossostener a expensas de nuestra propia salud.Muchas mujeres de 40 o más años podemos caer en transtornos de conducta alimentaria, conocida por sus siglas, TCA, como la anorexia y la bulimia.



¿Qué nos puede llevar a este transtorno en la alimentación?Puede coincidir con un momento de cambio en la vida, que nos genera inseguridad, baja autoestima, elevada autoexigencia, perfeccionismo, hipersensibiidad a la crítica.Lo común es que detrás haya pérdidas, duelos de familiares cercanos, separaciones, despidos laborales.Que consecuencias podemos encontrar?Pensamientos obsesivos con respecto a la comida y todo lo relacionado con ella, hiperatividad, insomnio, cambios bruscos de humor, sentimientos de tristeza y ansiedad, miedo a ganar peso, distorsión de la imagen corporal, agravamiento de la baja autoestima, elevada autoexigencia.  No son casos aislados. Para empezar, el 85% de los enfermos tiene más de 18 años, según datos de la Asociación en Defensa de la Atención a la Anorexia Nerviosa (Adaner). Las asociaciones que luchan por la erradicación de esta enfermedad desde todos los frentes reciben cada vez más peticiones de ayuda de pacientes adultos. Otro ejemplo: el 18% de las personas atendidas en la Asociación contra la Anorexia y Bulimia (Acab) de Cataluña son mayores de 30 años, el 57% están entre 18 y 30, y el 25% son menores de 18. También en la Unidad de Trastornos de la Alimentación del Hospital Santa Cristina de Madrid, los mayores son multitud.

La media de edad de los pacientes es de 30 años, pero el grueso lo constituyen las mujeres entre 30 y 40. Hay alguna incluso de 60. Se habla de proceso de recurrencia, de anorexia cronificada. Y la mayoría de las veces en femenino, puesto que por cada hombre enfermo hay 10 mujeres, de todas las edades. Los síntomas no respetan los años: excesivo culto a la imagen, búsqueda de mil excusas para no comer, pérdida de peso, desaparición de la menstruación, inapetencia sexual, nerviosismo e irritabilidad y un enorme vacío por dentro. Es más, con frecuencia surgen las patologías asociadas, que Andrés Gómez del Barrio, coordinador de la Unidad TCA del Hospital Valdecilla de Santander, describe: Adicciones, deterioro físico, desarraigo y cuadros de depresión y ansiedad.

A diferencia de las adolescentes, las mujeres de más de 40 años que padecen bulimia y/o anorexia encaran el problema en forma autónoma, asumiendo la enfermedad y su recuperación, pero aún así , resulta imprescindible tener el apoyo de sus familias para encarar cualquier tratamiento. De igual manera,  todo el proceso puede obtener mejores resultados si tanto la paciente como el médico trabajan sobre las causas de la enfermedad y no sobre las consecuencias. Para esto es fundamental elegir a un profesional idóneo, y concurrir a grupos de autoayuda, para tener un marco de comprensión y contención entre pares.

La vía para la curación es un tratamiento individual multidisciplinar, con un psicólogo, un psiquiatra, cuando hay mucha angustia o la sintomatología es aguda, y por supuesto, con otros especialistas, como el endocrino o el ginecólogo.