Ya hace casi un mes que nuestros hijos empezaron su rutina escolar y al principio es normal que haya llantos y un poco de ansiedad de separación, especialmente en aquellos peques que empiezan la guardería o el colegio, pero qué pasa si tras el período normal de adaptación esta situación persiste.
La ansiedad de separación está dentro de las etapas de desarrollo de los niños. Sin embargo puede convertirse en trastorno dependiendo de la duración y de la intensidad en las respuestas emocionales del niño y puede que necesitemos pedir ayuda a un profesional.
Ana Roa, Pedagoga especialista en Educación Infantil y colaboradora en nuestro espacio de expertos, explica en su libro "¡Vive la Vida!" explica que este miedo se suele experimentar cuando los niños se separan del padre, madre o cuidadores a los que se encuentran vinculados afectivamente y representan la seguridad.
"Cuando la ansiedad de separación se mantiene durante bastante tiempo y se altera el comportamiento social del niño, podemos hablar de un trastorno afectivo con indicios patológicos. Una de las manifestaciones más frecuentes de este trastorno es la adaptación negativa del niño a la escuela infantil" explica Ana Roa.
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