Siroco vivió anoche en su escenario eléctrico a dos bandas llenas de frescura en la juventud de sus canciones y muchas propuestas únicas.
Llegaba el momento de ver a La Juventud, la formación nos hizo sentir que esa juventud es una realidad. No solo por la performance del inicio con esos manifestantes, el echo de empezar con Karate a muerte y desde esa canción ir desplegando ese sonido propio con la rotundidad de batería y bajo mientras el teclado y guitarras iban fluyendo junto a la parte vocal nos dejaba claro que el disco y el directo tenían una unión real con esos sentimientos. Posteriormente Hacer el Baile y Tránsito de piel terminaban de poner en pie a los fans (ya de por si entregados). De los siguientes temas los que más nos gustaron fueron V.A.N. y Crema que fueron junto a La casa de María y el guiño al anterior proyecto con Miss My Soul que, junto al gran final nos dejó con la sensación de que están creciendo a pasos de gigante.
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