Ante el bullying no puede haber pasotismo

Por Zulema @MamaEsBloguera

Imagen de http://stat.mobli.com

El lunes por la tarde tenía cita con la profesora de G para ver qué tal iba en clase. Estoy yendo todos los meses ya que este curso anda un poco más loquito de lo normal. Sinceramente esperaba que me contase “lo de siempre”, que anda molestando, que algún día no anotó los deberes y no los hizo, que debe mejorar aún más su caligrafía.. pero me llevé una grata sorpresa. La sonrisa me llegó de oreja a oreja porque parece que el enano por fin se está centrando este curso. Las actividades de clase las está realizando con tranquilidad y todos sus exámenes están aprobados con buena nota.

Aprovechando la visita pasé también por la clase de A. a ver qué me contaba el profesor. La verdad es que ya sabía que iba muy bien y sus notas poco más se podían mejorar ya que está sobre el 10 siempre, salvo mates que está flojeando un poquitín. Pero lo que era una conversación sobre A. terminó en una conversación general sobre los niños. Una vez más mis alarmas han despertado.

No recuerdo exactamente cómo surgió el tema, pero el profesor me comentó que hay algún caso de bullying en su clase. La cosa es que él lo comenta como si nada, y me dice que tratan de no darle mucho bombo y simplemente observa. No lo entiendo y jamás lo podré entender, y por supuesto así se lo hice saber.

Le comenté que esos casos no se deben minimizar. Para mí lo primero es informar a las familias afectadas de lo que él cree que puede estar sucediendo en el colegio para que estén al tanto y puedan observar en casa, pero sobre todo para que puedan hablarlo con los niños y ver si consiguen soltar prenda de algo más. Los niños por sí solos rara vez lo cuenta a la familia, pero con algo de ayuda igual sí es posible. Me queda la esperanza de que el profesor me dio la razón y le vi bastante pensativo con lo hablado sobre este asunto. Ojalá cambie de postura y pase a ser una parte activa para zanjar esa situación.

Al llegar a casa como no podía ser de otra forma hablé con A. del asunto. Comenta que efectivamente hay un niño que está todo el día golpeando a los demás, amenazando, insultando y molestando, pero me asegura que con ella nunca ha sido así.

La verdad es que me ha dejado bastante preocupada esta situación. Ante estos casos pienso que no puede existir la pasividad del simplemente observar y callarlo todo. Las familias tienen derecho a saber lo que está pasando para poder ayudar a estos niños, y el centro debe tomar medidas. No es cosa de broma que ya más de un suicidio de niños hemos visto recientemente.

Creo también que el tema del bullying ha “evolucionado” (cosa que también le expliqué). Con esto quiero decir que antes, hace años, eran situaciones que se podían dar en el colegio pero no iban más allá. El niño volvía a casa y la situación quedaba ahí con esperanza de que al día siguiente el tema aflojase. Hoy en día con internet, redes sociales y mensajería instantánea el acoso puede convertirse en algo constante, y esto somete a una presión psicológica enorme a niños que no están preparados para ello ni saben cómo afrontar estas situaciones.

Espero que la charla con el profesor tenga algún resultado positivo por muy pequeño que pueda ser, pero si nadie hace nada y la situación sigue así iré a comentarlo con la directora del centro.