En la contraportada del libro podemos encontrar la siguiente descripción: "Este thriller bien documentado apasionará a los fans de Lincoln Child y Douglas Preston. El Testamento Maya es una apasionante carrera para salvar a la humanidad, e incluye una gran dosis de acción, romance y suspense." Soy lector habitual de los libros de los autores anteriormente citados yPara hacernos una idea de la capacidad adquisitiva de estos importes, hay que tener en cuenta que el precio de una libra de pan (450 gr.) era de 1 sous, en 1789. El equivalente actual puede ser una barra de 1/2 kgr. de pan, o dos barras de 1/4, o dos baguettes, de manera que podemos establecer un margen entre dos cantidades máxima y mínima, teniendo en cuenta que la oferta de este producto es actualmente muy variada y los precios dependen en gran medida del lugar de distribución, pues no es lo mismo el precio en un horno tradicional que en una gran superficie comercial. Después de una paseo por los mercados tenemos estos datos (son precios de Catalunya), según los cuales 1 sous de 1789 equivaldría a:
PRECIO MÁX.: 1,38 €PRECIO INTERMEDIO: 1,11 €PRECIO MÍN.: 0,85 €
Ésta sería la horquilla de las equivalencias entre el euro y el sous en 1789; una muestra más exacta sería la comparación con el precio actual del pan en París. Si en 1789 el salario medio de un obrero sin cualificar equivalía a 20 veces el precio de una libra de pan, la proyección de esos datos a los precios actuales del pan supone un salario entre estos márgenes:
MÁX. 27,60 €/día 828 €/mes de 30 díasMEDIO 22,30 €/día 669 €/mes de 30 díasMÍN. 17,00 €/día 510 €/mes de 30 días
En definitiva, aunque durante el siglo XVIII ha habido una elevación constante de los salarios, ha sido en general inferior al alza de los precios. Un 17% para el período 1771-1789. Se puede decir que el alza de los salarios siguió al alza de los precios, pero sin atraparla. En consecuencia, los salarios reales no aumentaron, sino que bajaron. Se calcula que un 25% en el período 1785-1789, coincidiendo con momento de gran elevación de los precios de los productos alimentarios básicos, cosa que condujo a la miseria a los elementos más débiles de las clases populares, alcanzando incluso a los sans-culottes, la parte más baja de la burguesía.
FUENTES:Soboul, A., La Révolution française. Paris, Gallimard, 1996, pág. 78.