Una tradición oriental le hace el primer obispo de dicha ciudad, ordenado por San Juan Evangelista (27 de diciembre, 6 de mayo, "Ante portam Latinam"; 8 de mayo y 26 de septiembre, Iglesias Orientales). Imperando Domiciano fue llevado ante el juez, el cual intentó convencerle de la antigüedad y lo venerable del culto a los dioses, frente a la novedad del Cristianismo. Antipas, que era versado en las Escrituras, le mostró como desde el principio, toda la Revelación apuntaba a Cristo, y no a los falsos dioses. Demostró la vacuidad de la filosofía y la maldad y repugnancia de los dioses, llenos de pecados y males como los humanos. Y todo siempre confrontándolo con la pureza de la fe cristiana y el testimonio de Jesucristo. El juez, irritado, mandó fuera metido en un toro de bronce (el toro de Phalaris) y este encendido hasta quemar vivo al santo. Aún dentro de aquel horno, Antipas entonaba salmos y cánticos al Señor, hasta que expiró.
A 11 de abril además se celebra a
San Guthlac de Cronwland, ermitaño.
Santa Godebertis de Noyon, virgen.