Antonio Machado fue un poeta, narrador y dramaturgo sevillano perteneciente a la generación del 98. Su poesía se caracterizaba por ser sencilla y personal y dejó un legado imborrable en la literatura. Su obra pasa por distintas fases a lo largo de su vida: una primera etapa basada en el entorno intelectual de sus primeros años; una segunda con influencia de sus lecturas filosóficas; y por último, su reflexión sobre la España de su tiempo. Nos vamos a acercar a su forma de pensar mediante estas frases:
- “Aprende a dudar y acabarás dudando de tu propia duda; de este modo premia Dios al escéptico y al creyente.”
- “Despacito y buena letra, que el hacer las cosas bien, importa más que el hacerlas.”
- “Hay dos clases de hombres: los que viven hablando de las virtudes y los que se limitan a tenerlas”.
- “Cuatro principios a tener en cuenta: Lo contrario es también frecuente. No basta mover para renovar. No basta renovar para mejorar. No hay nada que sea absolutamente empeorable.”
- “Es propio de hombres de cabezas medianas embestir contra todo aquello que no les cabe en la cabeza.”
- “Cuando nos vimos por primera vez, no hicimos sino recordarnos. Aunque te parezca absurdo, yo he llorado cuando tuve conciencia de mi amor hacia ti, por no haberte querido toda la vida.”
- “Por mucho que un hombre valga, nunca tendrá valor más alto que el de ser hombre.”
- “En política solo triunfa quien pone la vela donde sopla el aire; jamás quien pretende que sople el aire donde pone la vela.”
- “Algunos desesperados sólo se curan con una soga; otros, con siete palabras: la fe se ha puesto de moda.”
- “En cuestiones de cultura y de saber, sólo se pierde lo que se guarda; sólo se gana lo que se da.”