Uno de los últimos eventos internacionales que la extinta Yugoslavia vivió como un país unido fue la celebración del XXXV Festival de la Canción de Eurovisión, que tuvo lugar el 5 de mayo de 1990 en Zagreb, hoy capital de Croacia, pero por aquel entonces aún parte de la república socialista de Yugoslavia.
Esta edición se recuerda como una de las mejores en cuanto a nivel de canciones y con un escenario muy moderno para la época, y es que la televisión yugoslava quiso dar un aire de modernidad al evento, que se reflejó en el logo de Eurovisión en forma de labios y la creación de una simpática mascota que respondía al nombre de Eurocat, que ayudaba a presentar las canciones a los que eran los presentadores oficiales de la gala: Helga Vlahovic (croata), que ya había presentado alguna preselección yugoslava, y Oliver Mlakar (esloveno), que también presentó algún Jugovizija y algún Dora. Presentaron la gala en inglés, ella, y en francés, él. Hicieron un buen trabajo, aunque a veces tuvieran problemas en las votaciones, pero estuvieron simpáticos y muy agradables.
22 países acudieron la cita. No había muchos repetidores. Tan solo Ketil Stokkan, de Noruega, repetía participación (y acabó en la última posición). En algunos casos, como el del cantante chipriota, repetían en el festival, pero ahora como solistas, no como parte del coro, y otros, como el dúo islandés, que comenzarían una andadura por el festival, dadas sus participaciones posteriores. Había variedad de estilos. Desde los aires caribeños aportados por Francia, pasando por la pureza y bravura de la canción española, hasta llegar al pasteleo himno de Reino Unido, o la balada italiana o israelí.
Hay que destacar que a tono con el momento histórico que se vivía, fue un festival con canciones inspiradas en la unidad de Europa o que trataban el tema de los recientes cambios políticos sucedidos en el continente europeo con la caída del muro de Berlín en noviembre de 1989 (Italia, Noruega, Irlanda, Alemania, Austria, Finlandia…). Sin embargo, el tema vencedor trataba sobre otro tema de importancia política durante aquellos años: el comienzo de la Unión Europea que tendría lugar bajo un sólo mercado común al final de 1992. La canción estaba titulada “Insieme: 1992”, del popular cantante italiano Toto Cotugno, que daba de esta forma el segundo triunfo de Italia en la historia del concurso, aunque solo obtuvo tres máximas puntuaciones por seis de la francesa Joëlle Ursull que con "White and black blues" acabó en segundo lugar con un total de 132 puntos compartidos con el irlandés Liam Reilly y su "Somewhere in Europe".
Otro dato curioso de esta edición fue el problema con la música pregrabada de la representación española, por lo que tuvieron que interrumpir su interpretación a los pocos segundos de haber comenzado para empezar de nuevo minutos más tarde. Su actuación pese a todo fue exitosa, ya que acabaron quintas y su canción "Bandido" fue un éxito rotundo y supuso su definitivo salto a la fama.
Por otro lado, a la representante portuguesa de 22 años, Nucha (Cristina Baldaia), le tocó salir justo después del país anfitrión y delante de Irlanda, Suecia e Italia, lo cual no debió de favorecerla en las votaciones, pues a pesar de que se esmeró en una interpretación dinámica y alegre, llegada la hora de los votos la canción “Há sempre alguém” (Siempre hay alguien) sólo fue votada por Luxemburgo con un 7 y Reino Unido con un 2, y con esos 9 puntos se situó en vigésima y antepenúltima posición, la peor de la trayectoria portuguesa hasta la fecha (cuando ha pasado a la final).
Los diez mejores temas, a juicio de este Blog, fueron:
NÚMERO 10
Canción: Eitt lag enn (Una Canción Más)Intérprete: StjórninPaís: IslandiaLugar obtenido: 4to. Lugar
Curiosidades: En el festival de 1990 en Zagreb la TV de Islandia llega a su quinta participación y obtiene por fin un puesto de relevancia; hasta la fecha llevaba una trayectoria muy mediocre, con tres veces seguidas (los tres primeros años) en el decimosexto puesto y un farolillo rojo con cero puntos en 1989. En Zagreb la delegación islandesa gozó de un reconocimiento generalizado por parte de la mayoría de los jurados y alcanzó el 4º puesto con 124 puntos, el mejor de las 12 participaciones en islandés, las que van desde el debut con el grupo ICY hasta la original performance de Paul Oscar en 1997. El grupo Stjórnin (Gobierno en islandés) está constituido por un dúo mixto de vocalistas, Grétar Örvarsson y Sigríður Beinteinsdóttir, y cuatro músicos. A los dos cantantes volveremos a verlos dos años después, en la edición de Malmö de 1992, formando parte del cuarteto Heart 2 Heart y cantando una canción compuesta por el propio Grétar (Nei eda ja, puesto 7º); pero la experiencia eurovisiva de Sigríður no acaba ahí; representará a su país en solitario, con el nombre de Sigga, en 1994, con el tema Naetur (puesto 12º) y acompañará a Silvia Night como backing singer en la semifinal de Atenas de 2006. Sigga cuenta con el honor de haber cantando, sola o acompañada, en los tres mejores resultados de su país, en la etapa en lengua islandesa (1990, 1992 y 1994). La octava canción de la gala fue "Una canción más", que es lo que quiere decir "Eitt lag enn", título que se prestaba de entrada al chiste fácil. Pero lo cierto es que fue una actuación atractiva, divertida, con una sencilla pero eficaz coreografía, un pegadizo ritmo pop y una buena conjunción de voces. Nueve jurados la eligieron entre sus tres favoritas y le dieron una de las tres máximas puntuaciones, destacando los doces del Reino Unido y de Portugal; sólo la ignoraron cuatro jurados (holandés, alemán, francés y chipriota). Eitt lag enn, el primer gran éxito de Islandia en Eurovisión, fue versionada en inglés con el título "One more song". (Fuente: aquí)
NÚMERO 9
Canción: Milas Poli (Hablas Demasiado)Intérprete: Haris Anastasiou País: Chipre Lugar obtenido: 14to. Lugar
Curiosidades: En 1987, Haris estuvo presente en el festival como bailarín de Alexia, representante chipriota aquel año (7° Lugar). En esta edición, Haris salió al escenario luciendo un vestuario muy juvenil, con pantalones vaqueros, una camisa verde clara sobre una camiseta, y para rematar un chaleco de colorines, la típica moda de la juventud en la transición de la década. Estuvo flanqueado por dos bailarinas con las que compartió una coreografía muy de la época, llena de pasitos para aquí, pasitos para allá, giros y saltitos, “para nada gay”. Por detrás de ellos, había tres personas más que se encargaban de tocar instrumentos de percusión. A través de una melodía muy animada, Haris le canta a su amor que habla demasiado y no le permite encontrar la forma de transmitirle sus sentimientos. La letra de la canción había sido obra del propio Haris, mientras que la música la puso John Vickers, el cual estuvo como backing singer en 1983 (con el dúo Stavros & Constantina y la canción I agapi akoma zi) y escribió la letra de la versión inglesa del tema chipriota de 1999 (Tha'ne erotas - In the name of love). (Fuente: aquí)
NÚMERO 8
Canción: Macédomienne (Macedonia Mía)Intérprete: Philippe LafontainePaís: BélgicaLugar obtenido: 12do. Lugar
Curiosidades: La victoria de Bélgica en 1986 podía considerarse un oasis entre desiertos, un historial bastante mediocre, donde destacan sólo una victoria y dos segundas posiciones. A sabiendas de que el Festival se realizaría en Yugoslavia, Philippe Lafountaine contactó con la RTBF para representar a Bélgica. Se decidió no hacer preselección como algo excepcional y Philippe Lafountaine fue elegido de forma interna. Se encontraba en la cima de su popularidad, después de siete álbumes de gran éxito en toda el área francófona y haber recogido por su último álbum de 1989 premios en Francia, Bélgica y Canadá. El ofrecimiento de Philippe suponía poder jugar con una baza segura. El propio Philippe Lafountaine había escrito la canción inspirándose en su mujer, nacida en la ciudad macedonia de Ohrid, el título del tema hace referencia a la nacionalidad de su esposa. Uno de los motivos que llevó a RTBF a aceptar la propuesta de Philippe, además de su popularidad, es que el asunto de la canción favorecía las opciones belgas, al hablar de Macedonia cuando el Festival tendría lugar en la antigua Yugoslavia. (Fuente: aquí)
NÚMERO 7
Canción: Shara Barkhovot (Cantando en las Calles)Intérprete: Rita País: IsraelLugar obtenido: 18vo. Lugar
Curiosidades: La canción israelí salió de la partitura de Rami Kleinstein y de la pluma de Tzruya Lahav, en primer lugar. Luego salió de la voz de Rita, la esposa de Rami. Es una sentida balada en la que Rita luce todas sus dotes vocales, alcanzando registros bastante difíciles, vocal y psicológicamente hablando. En Eurovisión 1990 salió en décimo lugar, ataviada con un sensualísimo vestido negro y una melena salvaje, lo cual unido a sus contactos con el micrófono y al baile que ejecutó (no en vano, Rita es graduada Magna cum laude en danza y arte dramático), le dieron un aire bastante sensual a su interpretación. Ella estaba sola en el escenario, contoneándose alrededor del palo de micro y jugando con él y acabando su actuación rendida a sus pies, literalmente. La décima actuación del Festival del 90 es una de esas grandes interpretaciones en las que la garra de la intérprete les hace simplemente inolvidables, nos guste o no su canción. Pero sólo la votaron cinco jurados, con cuyos 16 puntos quedó en el puesto decimo octavo. A pesar de ello, Rita en su momento calificó su actuación como “terrible”, contando que se sintió bastante mal consigo misma ya a la salida del escenario yugoslavo y antes de saber los resultados, cuyo mal desenlace ya temía desde los mismos ensayos, en los cuales no se sentía nada a gusto. “Aquellos tres minutos en el escenario de Eurovisión fueron el culminar de un proyecto con el cual no me sentía confortable desde el inicio. Sabía que podría haber ido con una canción mucho más festivalera, pero en aquellos tiempos sentí que debía escoger una canción a la que fuera capaz de amar con todo mi corazón. Hoy en día creo que puedo mirar hacia atrás y sonreír, pero en su momento sentí que todo había sido horrible. Un día después de regresar de Zagreb, canté ante una multitud de 6000 personas y todos cantaron Shara barkhovot conmigo. Sólo entonces me di cuenta de que en el fondo, había hecho la elección correcta. Desde entonces canto Shara barkhovot en todos mis conciertos. Esta canción ya es parte de mí.” La IBA decidió de manera interna que Rita representará a Israel en Eurovisión. A ella no le entusiasmaba demasiado la idea en ese entonces en que ya era toda una diva del panorama musical hebreo, pero acabó aceptando. La IBA no le puso condiciones, le dejó total libertad para elegir canción, puesta en escena, ropa. Rita eligió Shara barkhovot siguiendo los criterios que ella misma ya ha referido en la cita de sus declaraciones. (Fuente: aquí)
NÚMERO 6
Canción: Musik klingt in die Welt hinaus (La Música suena por el Mundo)Intérprete: Egon EgemannPaís: SuizaLugar obtenido: 11er. Lugar
Curiosidades: Músico e intérprete con formación clásica, Egon Egemann (Egon Lackner) frecuentó las Academias de Música de Graz (ciudad donde nació) y de Viena, en Austria. Su instrumento característico es el violín. Después de una temporada en los Estados Unidos, Egon regresó a Suiza, donde se llegó a ser bastante conocido y reconocido por la crítica. Volvería a Eurovisión ocho años después, acompañando al grupo Gunvor en el escenario de Birmingham con la canción "Lass ihn". Egon se presentó en Zagreb todo de blanco, como su violín, en sintonía con la mayoría de los intérpretes de este año. Todavía estaba reciente el protagonismo de Suiza en el Festival, con la victoria de Céline Dion, también vestida de blanco, en el 88. La canción “Musik klingt in die Welt Hinaus” encaja en el patrón seguido por tantos países en el festival de Zagreb, con himnos a la paz, a la libertad, o, en este caso, al poder de la música en todo el mundo. Tuvo versión en inglés con el título “A song goes out around the world”. Dos jurados le dieron la máxima puntuación (el griego y el danés), y un 8 recibió del portugués. Al final, sumó 51 puntos y quedó en la mitad de la tabla (puesto undécimo). Mucho peor parado quedó en su segunda comparecencia eurovisiva, con Gunvor en 1998, también tocando un violín blanco, pues el marcador quedó sin puntos. (Fuente: aquí)
NÚMERO 5
Canción: Gözlerinin Hapsindeyim (Estoy atrapado en tus ojos)Intérprete: KayahanPaís: TurquíaLugar obtenido: 17mo. Lugar
Curiosidades: Cuando Kayahan Açar (nacido en 1949) consiguió la victoria en la selección final de su país era la sexta vez que lo intentaba. Había competido en cinco finales de la década de los 80. El tema, escrito y compuesto por el propio Kayahan, rompe un poco el esquema de ritmos frenéticos que venía presentando la TV turca en Eurovisión; sin perder su filiación y apego al folclore turco, Kayahan compuso una poética y romántica balada uptempo sobre la fuerza cautivadora de la mirada del ser amado. Kayahan no estuvo solo, pues contó con la bella voz de la cantante Demet Sagiroglu, acreditada en Zagreb como backing singer, más cuatro músicos con acordeón incluido. Una muy digna actuación que culminó con un beso de Kayahan a su guitarra y que no encontró sino la habitual escasez de puntos y una posición del fondo de la tabla, como ocurría casi año tras año. Sólo cinco jurados la votaron, destacando el 7 del yugoslavo. (Fuente: aquí)
NÚMERO 4
Canción: Hajde da ludujemo (Vamos a volvernos locos)Intérprete: TajčiPaís: YugoslaviaLugar obtenido: 7mo. Lugar
Curiosidades: El tema Hajde da ludujemo estaba compuesto por Zrinko Tutic, autor también del tema yugoslavo de 1986 (Željo moja) y posteriormente del tema croata de 1996 (Sveta ljubav). Tajči era ya una de las artistas más conocidas de Yugoslavia y el festival acrecentó su fama de forma notable. Tajči, ya que llevaba un vestido rosa chicle, muy ajustado, con gran escote y muy sexy. Además iba muy bien maquillada y peinada, imitando como era característico en ella la estética de Marilyn Monroe. Este tema era muy bailable (como era característico en los temas yugoslavos), por lo tanto efectuaron una sencilla pero a la vez simpática, sexy y divertida coreografía. Tajči comenzaba cantando en el centro del escenario y de ahí no se movió hasta el puente musical del tema. El directo fue impecable e hizo una de las mejores puestas en escena del festival. Consiguió una meritoria séptima plaza, con 81 puntos; la votaron trece países, destacando los 12 de Turquía e Israel y los 10 de Islandia, Irlanda y Chipre. Tajči versionó la canción en inglés con el título “Let's go crazy”. Su paso por Eurovisión la convirtió en una súper estrella en centro Europa. Hizo gran cantidad de conciertos con muchísimo público y logro tener gran cantidad de fans. Su sueño se hizo realidad y se convirtió en una gran estrella. En 1991, con el estallido de la guerra de los Balcanes, realizó numerosos conciertos por la paz, visitó a los soldados, numerosos hospitales. Era y es una persona muy religiosa y abandonó su carrera musical, su familia y amigos para cambiar su estilo de vida. Se fue a vivir a los Estados Unidos con 21 años. En un principio se fue a vivir a Los Ángeles su objetivo era ser feliz en paz, encontrarse a sí misma. Se cambió el nombre y además estudió, trabajó y aprendió a hablar inglés correctamente. Allí encontró la paz y empezó a componer temas en los que reflejaba su nueva realidad. En Los Ángeles conoció al que hoy en día es su marido, Matthew Cameron, con el que comparte la misma filosofía de vida. Se dedicó a cantar en iglesias y en pequeños recintos, su música mostraba su filosofía y forma de vivir la vida centrada en el cariño hacia su religión. Realizó giras por todo el país. A partir de ahí ha recorrido los Estados Unidos muchas veces, ha hecho miles de conciertos, seis álbumes y personalmente ha sido muy feliz. Tiene tres hijos. (Fuente: aquí)
NÚMERO 3
Canción: Bandido Intérprete: Azúcar MorenoPaís: EspañaLugar obtenido: 5to. Lugar
Curiosidades: La anécdota de la noche la puso la actuación española a cargo de Azúcar Moreno, encargadas de abrir la gala. Esto ha ocurrido otras tres veces, en 1961, 1992 y 2004. Pero nunca antes había ocurrido lo que pasó aquella noche en Zagreb: Presentación de las Azúcar Moreno. Dirige la orquesta el maestro Leiva por tercera vez (lo haría hasta 6 veces)... La música tardo en comenzar a sonar, y cuando lo hizo, ya estaba muy avanzada, y las Azúcar Moreno se dieron cuenta, y se volvieron hacia dentro otra vez. Mientras, la música siguió sonando, y el guitarrista se quedó solo bailando y haciendo el paripé. La explicación que dio Eduardo Leiva en una serie de programas dedicados al Festival que se emitieron hace unos años fue que ellos habían llevado algunos sonidos pregrabados, y que la organización, al darle al play misterDJ, no abrió el sonido. Mientras, la cinta seguía corriendo, hasta que alguien se dio cuenta, y en vez de parar y rebobinar, abrió el sonido, con la música ya muy avanzada. El maestro Leiva se cruzó de brazos y no dirigió la orquesta, hasta que se solucionó el problema y volvieron a actuar. Fueron cinco minutos de infarto. Ellas, salieron a flote de una manera increíble, y nos regalaron una de las mejores actuaciones españolas de la historia en el festival. Las chicas realizaron una actuación esplendida, saliendo del paso con mucha profesionalidad y con mucho aplomo, cosa que el público asistente valoró aplaudiéndoles mucho. ¿Les perjudicó el incidente o les benefició a la hora de las votaciones? Nunca lo sabremos. (Fuente: aquí)
NÚMERO 2
Canción: White and Black Blues (Blues Blanco y Negro)Intérprete: Joëlle UrsullPaís: FranciaLugar obtenido: 2do. Lugar
Curiosidades: Francia, 1990. En el canal estatal France 2, el jefe del departamento de programas de variedades es Marie-France Brière. Es ella quien debe decidir el futuro de la participación de Francia en el concurso. Después de analizar la participación francesa en los años anteriores, fue su decisión retirar la participación de Francia. Año tras año se sucedían los malos resultados y los cantantes que habían participado habían caído en el olvido. Sin embargo, la Dirección del canal France 2 no aprobó esta decisión, ya que consideró que la participación en el concurso era un servicio público. Dado que no se aprobó su decisión de retirar a Francia del festival, Marie-France Brière pidió libertad total para la elección de la participación francesa. Ella quería una canción de calidad, de un gran autor y compositor. Para ello, llamó a Serge Gainsbourg. Personalidad de múltiple talento, desde la pintura a la escritura, pasando por el campo de la composición musical, es un icono de la música francesa del siglo XX. Gainsbourg aceptó el desafío de volver a Eurovisión, después de la victoria que habían alcanzado en 1965 con "Poupée de cire, poupée de son", interpretada por France Gall. Como el tema de la denuncia era el racismo, Serge Gainsbourg y Marie-Brière Francia invitaron a una joven llamada Joëlle Ursull para interpretarla, convirtiéndose en la primera mujer negra que representaba a Francia en el Festival de Eurovisión.
Ursull nacía en Guadalupe en 1960, y fue elegida Miss Guadalupe a los 19 años. Pero no tardó en salir del mundo de la moda y la danza para dedicarse a su verdadera pasión: la música. Miembro fundador del grupo Zouk Machine, que obtuvo un gran éxito en Francia con la canción Maldon - La musique dans la peau, Joëlle Ursull dejó el grupo en 1990 para iniciar una carrera en solitario. La invitación que se le hizo para representar a Francia en el Festival de Eurovisión fue lo mejor que podía haberle ocurrido. Joëlle Ursull dijo que sí, pero, cuando leyó el texto por primera vez, se volvió atrás. De hecho, el tema que cantó en Eurovisión es la segunda versión del texto escrito por Serge Gainsbourg. Inicialmente, la canción se llama Black Lolita blues, y tenía un texto diferente. Al leerlo, Joëlle reaccionó de inmediato: "¡Mírame! Voy a ser la primera mujer negra que va a representar a Francia en Eurovisión. ¡No quiero cantar esto! Lolita es muy peyorativo". Tres días después, Serge Gainsbourg la llamó de nuevo y le ofreció un nuevo texto titulado White and black blues. A Joëlle le gustó el cambio y se preparó para Eurovisión. Era un hermoso poema con ritmo zouk. La canción francesa, que era a priori un gran reto y un riesgo, se convirtió en éxito debido a la gran profesionalidad que la rodeó. Vestida de rojo y entre tambores, Joëlle Ursull interpretó maravillosamente la canción de Gainsbourg. Recibió un total de 132 puntos y fue la canción que recibió el mayor número de 12, provenientes de seis países (la canción ganadora solo recibió 3 máximas puntuaciones). A pesar del brillante segundo puesto obtenido, y de haber sido considerada la canción más original del festival, a Marie-France Brière no le gustó el resultado final y denunció en la prensa irregularidades del jurado italiano. Sin embargo, la UER no recibió ninguna queja formal de su parte. Italia fue uno de los cuatro países que no votó la canción francesa; los otros tres fueron Grecia. Luxemburgo y Reino Unido. Después del festival, la canción francesa fue un gran éxito, alcanzando el 2º puesto en el Top50 de Francia. Estuvo 26 semanas en la lista, 16 de ellas entre los diez primeros lugares. Un gran éxito que le valió a Joëlle Ursull un disco de diamante, premio del que muy pocos artistas pueden presumir. (Fuente: aquí)
NÚMERO 1
Canción: Insieme: 1992 (Juntos: 1992)Intérprete: Toto CutugnoPaís: Italia Lugar obtenido: 1er. Lugar
Curiosidades: La canción italiana, escrita, compuesta y defendida por el conocido Toto Cotugno, se titulaba Insieme: 1992 y era un oportuno himno a la unidad europea meses después de la tan simbólica caída del muro de Berlín. Ya entonces, con 46 años, Toto Cotugno era un cantante experto en éxitos, no solo en su país, sino en toda Europa. Su canción L'italiano es todo un himno en Alemania. Había nacido en Fosinovo, un pueblo de la Toscana, en julio de 1943. Tal vez, a causa de tantos segundos puestos, la RAI le propone representar a Italia en el Eurofestival. Toto acude a Zagreb con una canción compuesta por él mismo, acerca de la unidad europea, y demostrando una experiencia apabullante, logra el triunfo para Italia. El coro de cinco personas que acompañó a Toto en su interpretación es, ni mas ni menos, que el grupo representante de Yugoslavia en 1975 (Pepel in Kri, que acabaron 13°). Fue la segunda canción de la gala, y contó tal vez con la iluminación más lograda de la noche, de forma que los cambios que experimentaba el escenario con los diferentes colores y diseños contribuyeron a una actuación memorable. Cuando salió a recoger el premio y a cantar su triunfadora canción, se había cambiado de ropa (le habíamos visto sudar durante las votaciones) y ahora lucía chaqueta negra. El final del Festival fue histórico por que Toto se bajo del escenario y cantó entre las gradas de la sala, abriéndose paso entre el público y periodistas que se encontraban presentes, todos emocionados por el suceso. 26 años después del “Non ho l'età” la RAI italiana cosecha su segundo triunfo, preludio del festival de Roma'91 y de la retirada de la cadena en 1994, y la ausencia más prolongada desde 1997 hasta 2011. (Fuente: aquí)