Toda partida de ajedrez supone un constante pacto entre la adquisición de pequeñas ventajas y los problemas que pueden derivar de realizar un movimiento u otro. La cuestión es que no seremos capaces de elegir un buen comienzo, una buena apertura, sin tener claro el concepto de centro, ya que todo desarrollo de piezas armonioso demanda la ocupación del centro. Pequeño y gran centro En el anterior diagrama podéis distinguir lo que se conoce por pequeño centro (casillas azules) y gran centro (casillas verdes). Haz clic aquí para leer todo el artículo