El Parlamento Europeo ha propuesto crear una marca europea para fomentar la confianza de los consumidores en el comercio electrónico. El informe incluye medidas para mejorar la transparencia y potenciar los sistemas de pago transfronterizos en Internet.
Según explica el propio Parlamento en un comunicado, apenas uno de cada tres consumidores europeos compraría en otros Estados miembros mediante comercio electrónico, debido a la desconfianza existente. Por eso se estudia que la Comisión introduzca una "marca de confianza europea sostenible, con unas normas claras y transparentes, que deben ser objeto de supervisión...y respaldado por un "mecanismo de control o aplicación de las normas como el que existe ya en algunos Estados miembros".