Creo que la pregunta que más se repite en mi casa cuando viene mi hermana a comer o a tomar café es "¿tienes algo dulce?", la verdad es que sí que es cierto que siempre suelo tener algo hecho pero a veces, la intendencia me falla y resulta que no, que no tengo nada dulce, sé que a ella no le importa pero la verdad es que a mi me da rabia no poder ofrecer nada con el café, y por eso últimamente siempre tengo en casa paquetes de hojaldre o de Yeast Dough o masa para croissants, (esas dos últimas de Lidl), creo que son muy socorridos a la hora de poder ofrecer algo dulce para acompañar el café y son muy fáciles de utilizar, y encima no requieren mucho tiempo de horno.
Como ya sabréis, me encantan los rollitos de canela, podéis ver más versiones aquí y aquí, pero en esta ocasión he querido ir un poco más allá y meterle fruta, ¿que fruta?, pues manzana que creo que es la fruta que mejor pega con la canela ¿no os parece?.
Están hechos en veinte minutos (incluido el horneado), y son deliciosos para acompañar el café y el té.
Ingredientes:- 1 plancha de masa de hojaldre (en este caso es de Lidl).- 1 manzana.- 80 gramos de azúcar.- 15 gramos de mantequilla derretida.- Canela al gusto.
Sacar de la nevera la plancha de hojaldre, unos treinta minutos antes de empezar a trabajar con ella. Mientras, pelar y cortar la manzana en trozos muy pequeños. Mezclar en un bol la mantequilla derretida, el azúcar, la canela y la manzana troceada.
Estirar la masa y cubrirla con la mezcla anterior. Dejar unos centímetros sin cubrir por todos los lados para que la mezcla no se salga cuando se enrolle.
Precalentar el horno a 180º.
Enrollar la masa con cuidado y cortar rodajas de unos dos centímetros. Colocar los trozos en la bandeja del horno (previamente preparado con papel de horno), o en una bandeja redonda. Llevar al horno y hornear durante 15 minutos.
Espero que os haya gustado.