Aprenda a darle placer a una mujer con estos consejos

Publicado el 26 mayo 2017 por Glangocomve @glangocomve

Te traemos varios consejos para que usted aprenda masturbar a una mujer, hacerle sexo oral y besarla en lugares inexplorados.

Si usted quiere disfrutar del sexo al máximo, lo mejor es que se dedique a darle placer a su pareja. Estos son unos consejos para que usted se vuelva un maestro en el sexo oral, la masturbación femenina y los besos. Lincy Acosta le recomienda:

Las mejores posiciones para que una mujer disfrute del sexo oral

En las mujeres, el sexo oral proporciona, en algunas ocasiones, mucho más placer que incluso la misma penetración. Esto se debe a que durante el sexo oral la estimulación del clítoris es completa, durante la penetración la estimulación más placentera es la del punto G. Se sabe que es el clítoris aquel que permite encontrar con mayor facilidad el orgasmo en las mujeres.

Pocos hombres conocen que la estimulación sexual en la mujer cambia conforme a la posición sexual que se tome antes de ejecutar cualquier práctica sexual. En este artículo conocerán las ventajas de las tres posiciones sexuales más placenteras para practicar sexo oral a las mujeres.

Las partes del cuerpo más efectivas para besar a una mujer

Debería saber que hay algo llamado 'zonas erógenas': son áreas del cuerpo con gran cantidad de terminaciones nerviosas que al ser estimuladas producen gran placer. Suelen ser tan sensibles que un simple suspiro puede activar los receptores nerviosos, además, es importante saber que el placer producido en ellas con respuestas de carácter psicológico, como el enamoramiento. Los besos bien dados son tiros que dan en blanco y con mucho éxito. Empecemos:

Los genitales son definitivamente una zona erógena, es decir, están casi que diseñadas exclusivamente para producir placer, sin embargo, el "pre" también necesita de la estimulación ajena a los genitales y si este tipo de estimulación es ajustada en su estilo de seducción, seguramente los genitales experimentarán sensaciones que prolongarán y aumentarán la lubricación vaginal.

Consejos prácticos para masturbar a una mujer

Antes de comenzar a masturbarla es importante que ella esté excitada y lubricada, de lo contrario va a ser incómodo y, en algunos casos, doloroso. Consejo clave: tener las uñas cortas y limpias para no generar molestias posteriores. Si decide usar aceites o lubricantes, seguro serán bien recibidos por ella.

Tenga en cuenta que esta parte del cuerpo es muy, pero muy sensible y cualquier presión inadecuada pasará de ser satisfactoria a incómoda. Para encontrarlo, ponga los dedos al comienzo de los labios vaginales y con una leve presión hacia arriba ubique una pequeña protuberancia bajo el pubis.

El clítoris nunca se debe tocar masajeándolo con fuerza intermitente porque es incómodo. Intente rodearlo con los dedos, de arriba hacia abajo por cada lado (derecho e izquierdo). Cuando sienta que está erecto, presiónelo suave sin mover los dedos. Demasiada fuerza con los dedos, puede parecerle incómodo.

Después de estimular su clítoris correctamente, notará que ella estará empapada. Deslice esa lubricación por los labios vaginales con los dedos o ayudado de la palma. Siga estimulando mientras con la otra mano toca sus senos, su cabello o cualquier parte sensible de su cuerpo.

Cuando sienta que su pareja está disfrutando y luego de extender toda su lubricación por los labios vaginales, empiece a jugar con los dedos en la punta de su vagina. Introduzca inicialmente solo la punta de sus dedos, la yema, cuando decida introducirlos por completo procure seguir presionando el clítoris, será bastante satisfactorio para su pareja.

El placer de los pedos vaginales

Durante el sexo siempre pasan situaciones vergonzosas. Una de las cosas por las que ellas más se avergüenzan es por sonido de los famosos pedos vaginales. Y es de estos sonidos, que dan un poco de risa, que hablaremos en este artículo.

Los pedos vaginales, flatulencia vaginal, ventosidad vaginal o petus de nena es la explosión de aire que previamente fue acumulado en la vagina. Por lo general, no generan algún sonido, pero es normal que estos suenen similar a una flatulencia anal.