Aprender haciendo

Publicado el 02 mayo 2019 por Carlosgu82

La generosidad se va perdiendo de apoco. Cuando somos pequeño queremos todo para nosotros. A medida que crecemos, nuestros padres, maestros y adultos nos enseñan a compartir. Gracias a ellos podemos jugar con amigos ,vecinos, sin pelear.
También debemos recibir lo que nos ofrecen, por qué la generosidad es una ida y vuelta.
Construyamos un mundo mejor, seamos todos compañeros, con justicia y amor, sobretodo solidaridad. No hace falta hacer algo extraordinario , empecemos con algo chiquito y que esto vaya creciendo. Si te pones a pensar en tu barrio te darás cuenta quien necesita de tu ayuda Nunca olvidemos dar las gracias, siempre con respecto ante cualquier problema.
Si tú empiezas con una buena acción, ayudas a una persona, esa persona hace lo mismo por otra y así sucesivamente, el resultado será increíble.

Imagina si todos pudiéramos tener un gesto de generosidad cada día, seguramente el mundo sería un lugar mejor. El hecho de dar, ofrecer y regalar, aunque sea una sonrisa nos acerca a los demás, nos hace mejor persona y nos alegra la vida. Los niños pueden aprender, apreciar y poner en práctica estos valores desde pequeño.