Hola ¿has oido este versiculo? Gotera continua en tiempo de lluvia Y la mujer rencillosa, son semejantes; Proverbios 27:15, es tan fácil caer en este supuesto bueno al menos para mi si, porque si Dios no tomará el control de mi vida yo sería una gran gotera continua, has tenido una gotera en tu techo yo si y ahora tengo una pero en mi lavaplatos el agua cae y cae y el suelo donde cae ya se puso amarillo, así aveces nos comportamos las mujeres cuando nos molesta algo de nuestro esposo estamos duro y dale con nuestras palabras y podemos dañarlos, yo me propuse no hacer eso pero saben muchas veces caigo y vuelvo a ser esa gotera continua con mis palabras, pero saben algo doy gracias a Dios que el es el que esta tomando el control de mi matrimonio Dios va limpiando mi vida, mi caracter, mis pensamientos y me va dando lo que necesito para ser esa mujer que quiere que yo sea, apenas estoy empezando llevo un poco más de un mes de casada y he aprendido mucho, pero se que mientras mi roca sea Dios en Cristo iré de victoria en victoria, saben Dios me esta enseñando a amar a mi esposo, a bendecirlo, se que toda mi vida debo estar de rodillas para ser de bendición a las personas de mi alrededor y no serles de maldición.
Hay cosas que Dios me muestra que debo hacer para mi esposo como darle consejos conforme a la palabra de Dios, orar por el y con el, animarlo a buscar más de Dios pero hay cosas donde Dios me ha mostrado que debo callar, orar y esperar con paciencia a que Dios vaya moldeando su vida así como lo va haciendo conmigo y la verdad no es nada fácil tener paciencia pero siento que cada vez que busco a Dios, Dios me fortalece y me da una paz y descanso porque confío en El.
Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar. Mateo 11:28.
Así que si quieres salir victoriosa en tu matrimonio y eso es lo mínimo que puede pasar porque lo máximo es que seguirás conociendo a quien te ama mas que es Dios vive la vida en oración y su palabra obedeciendola con fe y no sólo oyendola.
Tu esposo es otro ministerio hermoso en el que vale la pena invertir ya que no son 2 si no ya son 1.
y los dos serán una sola carne; así que no son ya más dos, sino uno. Por tanto, lo que Dios juntó, no lo separe el hombre. Marcos 10:8-9.