Aprendiz de asesino (Robin Hobb)

Por Lorienold @lorienold

El protagonista de la historia es Traspié, el hijo bastardo del príncipe Hidalgo, heredero del trono de los Seis Ducados (cuyo título es “Rey a la Espera”, pues además de ser el futuro rey, actúa como un segundo mandatario del Estado, encargándose de aquellos asuntos que le delega el monarca de turno). Cuando cumple seis años, su abuelo materno lo entrega a los Vatídico para que se ocupen de él; el descubrimiento de su existencia hace que Hidalgo renuncie a sus derechos al trono y abandone la corte. El pequeño Traspié permanece en el palacio real de Torre del Alce, al cuidado de Burrich, el caballerizo y mejor amigo de Hidalgo.

Al cabo de un tiempo, su abuelo el rey Artimañas decide buscarle una ocupación “útil” a Traspié, y ordena que sea entrenado para convertirse en un asesino real, eliminando en secreto a todas aquellas personas que puedan representar una amenaza para la Corona. Esto hace que Traspié, desde muy joven, desempeñe un rol clave —aunque clandestino— en los asuntos políticos del reino, que enfrenta una nueva amenaza cuando los ducados costeros comienzan a recibir ataques sistemáticos de los llamados Corsarios de la Vela Roja, un pueblo de piratas que viven del pillaje y de la guerra. Además, Traspié comienza a advertir con preocupación las ambiciones de su tío Regio, un príncipe vanidoso, frívolo y cruel que desea convertirse en rey pese a ser el hijo menor de Artimañas.

Este libro de Robin Hobb es el primero de “La trilogía del Vatídico” que sigue la vida de Traspié Hidalgo Vatídico (Fitz Chivalry Farseer en el original), conocido como Traspié, en un reino llamado los Seis Ducados mientras su tío, el Príncipe Veraz, intenta hacerle la guerra a los Corsarios de la Vela Roja de las Islas del Margen, quienes atacan las costas del reino convirtiendo a la gente de los Seis Ducados en Forjados: aún vivos pero sin emociones, sin alma. Mientras tanto, los celos del Príncipe Regio y su complacencia ante sus propios caprichos amenaza con destruir los Seis Ducados.

Es literatura fantástica de primera línea y me ha gustado mucho.  Verdaderamente muy entretenido.