Esta mañana se ha aprobado, con los votos favorables del PP y UNPA, la abstención del Grupo Municipal Socialista y nuestra oposición, el informe de alegaciones al PGOU emitido por el Redactor.
Este informe rechaza la gran mayoría de alegaciones que presentamos y que cuestionaba el Documento de PGOU aprobado de forma inicial por sus múltiples fallos o la falta de documentación y al que ya calificamos como una chapuza técnica.
Esta falta de documentación hace que no se valore en condiciones precisas como afectaría a Alpedrete el crecimiento propuesto por PP y UNPA en aspectos como el tráfico o las infraestructuras. Caso aparte es el del agua, ya que el propio Canal de Isabel II no garantiza, según sus informes, el suministro a los desarrollos.
Además en esta segunda exposición pública se han producido nuevos cambios que benefician a intereses particulares en vez de beneficiar intereses generales y eso es algo que viene repitiéndose en la farragosa redacción de este PGOU. Como hemos repetido desde el inicio este Plan Urbanístico se basa en favorecer ciertos intereses y no soluciona los problemas que tiene Alpedrete.
Frente a la participación ciudadana, la transparencia y la ética de los representantes de nuestro Ayuntamiento nos hemos encontrado con un PGOU lleno de asuntos oscuros y aprobado a través de reuniones entre el PP y UNPA.
Desde el Grupo Municipal Izquierda Unida – Los Verdes (y así lo seguiremos defendiendo en la candidatura que apoyaremos bajo el nombre de Alternativa Ciudadana de Alpedrete) consideramos que este PGOU es malo para los vecinos de Alpedrete por lo que queremos otro PGOU. Queremos un cambio de modelo de municipio que sirva para mejorar la calidad de vida de los alpedreteños y alpedreteñas, que cree empleo de calidad, alejado del modelo del ladrillo y que sirva para facilitar el acceso a la vivienda a través de la construcción de viviendas sociales. Esas mismas viviendas que no han sido construidas en dos legislaturas del PP aún pudiendo simplemente porque no entran dentro de sus prioridades, ya que lo que ellos llaman viviendas sociales no son sino viviendas algo más baratas, gracias a algún tipo de subvención, que siguen sin ser accesibles para aquellos que no pueden acceder al mercado de vivienda.