Y es que desde que arranca con la melancólica Radio Silent, que bebe tanto de los Gigolo Aunts más pausados como de los grandes logros de Crowded House, una amalgama de emociones explotan sin remedio y es imposible no dejarse llevar.
Tras ella, el power-pop Mr. Gibberish, que con ese título, ese arranque y esos coros tan Beatles hará las delicias de cualquiera que sepa disfrutar de las grandes canciones; y South Bristol, East London, la más experimental del pack y en la que nos envuelve en esa atmósfera irresistible a base de teclas y cuerda.
Remata por todo lo alto, primero con We Used To, que admito que la que me enamoré desde el mismo momento de empezar y que creo que simple y llanamente tiene todo lo que necesita una gran canción: emoción, épica, silencios y ante todo, mucha verdad; y después con la instrumental Shonash Ravine, rúbrica perfecta para este trabajo sin fisuras y con tantas sensaciones en su interior. Enorme.