A la hora de categorizar un partido como “bueno” o “malo” dos son los factores que suelen tenerse en cuenta: el nivel técnico y la carga emotiva. Se ha escuchado mucho hablar de partidazos donde los dos equipos tiraban la pelota para arriba pero la incertidumbre se mantenía hasta último momento, mientras que –con la debida excepción del Barcelona– se consideraron aburridos los encuentros simplemente porque no había cosas importantes en juego.
Boca igualó con Banfield y le puso suspenso a la definición
En un fútbol argentino donde el nivel viaja en tobogán semana tras semana, los resultados de la fecha 17 al menos dan la tranquilidad de que el Torneo Clausura se prepara para un final no apto para cardíacos. Son seis los equipos peleando por quedarse con el título, separados por apenas tres puntos cuando quedan seis por jugar, y cinco conjuntos luchando por evitar quedarse con el único boleto directo para acompañar a Olimpo a la B Nacional o jugar la Promoción. Como condimento extra está el caso de Tigre, inmiscuido en las dos contiendas.
Cuando nadie lo esperaba, Boca dejó puntos en su duelo con Banfield y sus perseguidores aprovecharon para acercarse al conjunto de Julio César Falcioni, que con 33 unidades sigue siendo el único líder. El sorprendente Arsenal, por ejemplo, se impuso ante Argentinos, se ubica como escolta a un punto y visitará la Bombonera en lo que promete ser el duelo sobresaliente de la próxima jornada. Tigre también está segundo, aunque su prioridad sigue siendo otra, como se verá más abajo.
Tigre consiguió una victoria clave y da pelea en dos frentes
Más atrás se ubica un segundo pelotón, a quienes probablemente el empate de Boca les haya generado sensaciones encontradas: alegría por la chance renovada, lamentos por las oportunidades desperdiciadas. El renacido Newell´s Old Boys de Gerardo Martino se aprovechó del mal momento de Independiente, se encuentra expectante con 31 puntos y no pierde las esperanzas. Más atrás, con 30, está Vélez, sin dudas el que más hizo para autoboicotear sus opciones de campeonar aunque la matemática aún lo mantenga vivo.
Distinto es el caso de All Boys, también a la espera con 30 porotos. Primero, porque la campaña de los de Floresta superó todas las expectativas previas, que apuntaban apenas a mantener la categoría. Segundo, y no por eso menos importante, porque en la última jornada recibe en su reducto al líder, lo que le otorga mayor esperanza.
El hecho de que el próximo fin de semana se enfrenten Vélez y Tigre, además de otorgar una cuota adicional de emoción, asegura que no habrá campeón por lo menos hasta la última fecha. Por supuesto, las posibilidades de que haya que desempatar para definir al ganador son considerables…
En el otro extremo de la realidad, pero con el mismo (o máyor) nivel de tensión, está la lucha por quedarse. Con el morbo adicional que genera la presencia de San Lorenzo entre los damnificados, potenciado por la posibilidad de que Quilmes, Central o River esperen del otro lado en una hipotética Promoción, la definición seguramente pondrá los pelos de punta a más de uno.
En el enfrentamiento esperado por todos hace ya varios meses, Tigre fue claramente superior a San Lorenzo, lo derrotó por 3-1 y por primera vez en la temporada está afuera de todo, algo que parecía virtualmente imposible allá por agosto. Lo más sorprendente es que lo hizo jugando al fútbol, cosa no acostumbrada para los equipos que pelean abajo. Pegadito a estos dos está Banfield, que parecía salvado pero por culpa de una seguidilla de derrotas deberá sufrir hasta el final.
Darío Gandín, una de las cartas de salvación de Atlético de Rafaela
De todas maneras, gran parte de lo que suceda estará atado a la suerte de los recién ascendidos, cuyos partidos tienen un triple peso relativo en el promedio. Actualmente el que estaría descendiendo sería Atlético de Rafaela, que estará condenado en caso de perder ante Racing y Godoy Cruz. Sin embargo, atención: si la Crema gana ambos enfrentamientos, queda automáticamente salvado de todo. Muy similar es el caso de San Martín de San Juan, revitalizado desde la llegada de Facundo Sava, y con un final de película a la vista: en la última fecha recibe nada más y nada menos que a San Lorenzo. Aquí tampoco se descartan desempates para definir a los relegados.
Como queda demostrado, puede pasar cualquier cosa. Al menos 6 partidos de la atrapante jornada 18 guardan relación directa con alguna de estas dos luchas, y dependiendo de los resultados podrían ser 8 los encuentros trascendentes en la jornada de cierre. Difícilmente se vea un buen nivel de juego, pero algo está garantizado: no faltarán las emociones…