Las arañas maduras aparecen de mayo a agosto. Las hembras de esta especie poseen la capacidad de cambiar de color, del blanco al amarillo, que tarda un par de días en completarse. Este camuflaje convierte a las arañas en difíciles de detectar tanto por sus presas como por sus depredadores potenciales.
Los machos son de tamaño mucho menor y bastante diferentes.