Arcade Review – Pirates

Publicado el 12 mayo 2017 por César César Del Campo De Acuña @Cincodayscom

Noiseland Video Games…por César del Campo de Acuña

Título: Pirates.
Título en Japón:
Desarrolladora: NIX.
Año de Lanzamiento: 1994.
Género: shoot ‘em up. Rail shooter.
Modos de Juego: Máximo de 2 jugadores.
Niveles: 12 niveles.

Piratas

Hoy, En grandes misterios de la humanidad hablaremos de como en los 80 todas y cada una de las salas de cine fueron devoradas por una manada de videoclubs rabiosos y de cómo el software español llego a unos niveles de calidad que no hizo falta que se volvieran a hacer más videojuegos nunca. Aunque lo primero todos sabemos que es verdad lo segundo es una mentira tan grande como la tranca de Mark Wahlberg en Boogie Nights. La Edad de Oro del Software Español… ¿puede haber un concepto más sobado por la alargada mano de la nostalgia? Probablemente y no. El caso es que en España se siguieron haciendo videojuegos cuando los microordenadores se fueron a la porra (algo que significa acabar en un sucio altillo cogiendo polvo hasta que un día, con 40 castañas te da por volver al pasado) y una de las responsables fue NIX S.A. una compañía que lanzó dos títulos para el mercado de los salones recreativos que respondieron a los sugerentes y exóticos nombres de Genix Family y Pirates, siendo este último el que hoy nos ocupa.

Pero, antes de meterme en materia déjenme señalar que en NIX S.A. no estaban sobrados de imaginación ya que los dos títulos que desarrollaron eran clones de juegos tan exitosos como Super Pang (Mitchell Corporation – 1990) en el caso de Genix Family y los rail shooter Cabal (TAD Corporation – 1988), Blood Bros (TAD Corporation – 1990) y NAM 1975 (SNK – 1990). El propio Tomàs Bases, diseñador gráfico en NIX S.A., así lo afirma en una entrevista. El caso es que Pirates, no tiene nada que envidiar (bueno, un poco sí) a los juegos que imita, copia o homenajea (utilice la palabra que quiera según lo dura que tenga la cara). Pirates, como ya he mencionado, es un entretenido rail shooter en el que los jugadores se pondrán en la piel de unos piratas (un pirata en el caso del jugador número 1 y una pirata en el caso del jugador número 2, si haber diferencias entre ellos como si ocurría en el recomendable Wild Guns de Súper Nintendo lanzado el mismo año que Pirates por Natsume) que, siguiendo un mapa del tesoro, tendrán que llegar hasta un colosal tesoro al que llamaremos (bueno…al que llamare) El Dorado (veis NIX S.A. no son los únicos que pecan de falta de originalidad).

Para llegar hasta el tesoro los protagonistas tendrán que abrirse paso a sangre y fuego, entre incontables enemigos, utilizando sus fiables pistolas (la cuales podrán obtener hasta dos mejoras limitadas que las convertirán en una suerte cañón y/o en una ametralladora) y bombas. La mecánica es sencilla; Cada una de las pantallas de los 12 niveles (divididos en 4 islas) que componen esta aventura tiene una barra que indica el número de enemigos a derrotar antes de pasar a la siguiente fase. Al terminar la tercera pantalla nos enfrentaremos al consabido jefe de la fase (un barco volador, un tanque pirata, un cangrejo gigante y una suerte de tanque Maya de Piedra). Para sobrevivir a los intensos tiroteos (donde no solo nos atacaran los piratas e indígenas que se ponga en nuestro camino, sino que además nos bombardearan desde barcos, fuertes y posiciones elevadas) no solo contaremos con nuestras armas, sino con la habilidad de esquivar los proyectiles enemigos deslizándonos por el suelo.

El nivel de dificultad resulta bastante elevado. Las tres (cuatro si contamos con el jefe final) primeras pantallas son un paseo por el parque pero a partir de la segunda el juego se convierte en un Bullet Hell de manual en el que esquivar los disparos enemigos se convertirá en nuestra principal preocupación y prioridad. Los enemigos, sin tener unos sprites demasiado detallados (más allá de los Capitanes Piratas que lanzan cuchillos), están muy bien animados pero resulta sorprendentemente difícil atinarles por lo reducida que es la caja de impactos y el cursor de fuego de nuestras pistolas. Añadan que el jugador, por moneda cuenta con tres impactos y los power ups, a diferencia de las bombas, no son acumulables. La música, aun siendo limitada y un tanto machacona, acompaña bien la acción. En el aspecto sonoro en el que Pirates brilla especialmente es en el de los efectos de sonido, especialmente en el de las voces digitalizadas, las cuales son claras y audibles a la perfección.

Otra cosa que me gusto es la variedad de escenarios. Cada isla cuenta con al menos tres lugares donde desatar el infierno sobre todos los rufianes que nos salgan al paso y además están llenos de elementos destruibles (donde se ocultan jugosos bonos de puntos que, dicho sea de paso, no sirven para nada) algo que, en este tipo de juegos, siempre es un plus. Añadan al aspecto visual que entre los cientos de enemigos que trataran de cosernos a balazos, de vez en cuando aparecerán otros personajes y animales (desde brujas a damas de alta alcurnia, pasando por vacas, serpientes, monos, esqueletos y peces voladores) a los que si disparamos nos darán o bien los power ups de duración limitada anteriormente descritos o bombas (eso si, la risilla de la bruja, cuando le disparas, acaba por taladrarte los oídos al sonar sospechosamente que unos enemigos del aborrecible Dark Castle).

Personalmente puedo decir que Pirates de NIX S.A. es un buen juego que tiene muy poco que envidiar a los títulos que copia. Nunca lo encontré en un salón de juegos cuando existían y los frecuentaba, pero si me hubiera topado con el probablemente le abría dedicado unas monedas.

contacto@cincodays.com

Síguenos en Facebook:

https://www.facebook.com/Cincodays/

Síguenos en Twitter:

@Cincodayscom


Archivado en: Cajon de Sastre, Noise Land Video Games, Videojuegos