Se dice, y con razón, que en el matiz está la diferencia. Quién no entienda las diferencias de matiz, pero fundamentales, que hay entre Estado autonómico y Estado federal (en el primero la soberanía es única y está residenciada en el Estado y el pueblo en su conjunto; en el segundo la soberanía es compartida entre el Estado federal, los Estados federados, el pueblo de la Federación y el pueblo de los Estados federados) es que no ha entendido nada del asunto en cuestión. Les recomiendo la lectura de un libro clásico al respecto: El Federalista (Fondo de Cultura Económica, México, 1994) escrito por tres "ilustrados" estadounidenses, Alexander Hamilton, John Jay y James Madison a finales del siglo XVIII. Sobre el federalismo como teoría política y las posibilidades de organizar España y Europa como entidades federales vengo escribiendo en el blog con asiduidad. Me gustaría destacar solo dos de mis entradas al respecto: "España: crisis total o reforma constitucional" y "Federalismo mejor que nacionalismo", e invitarles a su lectura. Precisamente hoy hace un mes "El Hufgington Post" escribía sobre la presentación en la sala central de la London School of Economics, llena a rebosar, de una propuesta de federalización de la Unión Europea: "Manifiesto por una Europa postnacional y federal" que permitiría sacar a la Unión del marasmo y la inoperatividad e ineficacia en que se encuentra sumida. La presentaban conjuntamente los eurodiputados Guy Verhofstadt, líder del grupo liberal y exprimer ministro de Bélgica, y Daniel Cohn-Bendit, líder de los Verdes y antiguo y combativo mayo-sesentaochista con el apelativo de Dany el Rojo. Unos días después, y sobre el mismo asunto, publicaba "El País" un artículo titulado "¿Qué es exactamente la unión política?", firmado por Olaf Cramme, director de "Policy Network", y la profesora Sara B. Hoboit, catedrática de Instituciones Europeas en la London School of Economics. Sobre las posibilidades y dificultades de ese proceso de federalización de España y Europa me gustaría animarles a la lectura de otros dos textos. El primero, de nuevo en "El País", con el título de: "¿Federalismo sin federalistas?", de Pablo Beramendi, profesor de Ciencias Políticas en la Duke University; sin duda el mejor y más certero análisis que he leído en bastante tiempo al respecto. El segundo, hoy mismo, en el diario "Público": "Cinco propuestas para una España federal", del profesor de Derecho Constitucional y exdiputado socialista, Elviro Aranda. Son opiniones con las que coincido en gran manera. No quiero hacer de glosador de unos textos a los que ustedes mismos pueden acceder, así que a ellos les remito. El vídeo que acompaña la entradare coge la presentación, de la que les hablaba al comienzo, del "Manifiesto por una Europa postnacional y federal", en la London School of Economics. Y sean felices, por favor, a pesar del gobierno. Tamaragua, amigos. HArendt
Se dice, y con razón, que en el matiz está la diferencia. Quién no entienda las diferencias de matiz, pero fundamentales, que hay entre Estado autonómico y Estado federal (en el primero la soberanía es única y está residenciada en el Estado y el pueblo en su conjunto; en el segundo la soberanía es compartida entre el Estado federal, los Estados federados, el pueblo de la Federación y el pueblo de los Estados federados) es que no ha entendido nada del asunto en cuestión. Les recomiendo la lectura de un libro clásico al respecto: El Federalista (Fondo de Cultura Económica, México, 1994) escrito por tres "ilustrados" estadounidenses, Alexander Hamilton, John Jay y James Madison a finales del siglo XVIII. Sobre el federalismo como teoría política y las posibilidades de organizar España y Europa como entidades federales vengo escribiendo en el blog con asiduidad. Me gustaría destacar solo dos de mis entradas al respecto: "España: crisis total o reforma constitucional" y "Federalismo mejor que nacionalismo", e invitarles a su lectura. Precisamente hoy hace un mes "El Hufgington Post" escribía sobre la presentación en la sala central de la London School of Economics, llena a rebosar, de una propuesta de federalización de la Unión Europea: "Manifiesto por una Europa postnacional y federal" que permitiría sacar a la Unión del marasmo y la inoperatividad e ineficacia en que se encuentra sumida. La presentaban conjuntamente los eurodiputados Guy Verhofstadt, líder del grupo liberal y exprimer ministro de Bélgica, y Daniel Cohn-Bendit, líder de los Verdes y antiguo y combativo mayo-sesentaochista con el apelativo de Dany el Rojo. Unos días después, y sobre el mismo asunto, publicaba "El País" un artículo titulado "¿Qué es exactamente la unión política?", firmado por Olaf Cramme, director de "Policy Network", y la profesora Sara B. Hoboit, catedrática de Instituciones Europeas en la London School of Economics. Sobre las posibilidades y dificultades de ese proceso de federalización de España y Europa me gustaría animarles a la lectura de otros dos textos. El primero, de nuevo en "El País", con el título de: "¿Federalismo sin federalistas?", de Pablo Beramendi, profesor de Ciencias Políticas en la Duke University; sin duda el mejor y más certero análisis que he leído en bastante tiempo al respecto. El segundo, hoy mismo, en el diario "Público": "Cinco propuestas para una España federal", del profesor de Derecho Constitucional y exdiputado socialista, Elviro Aranda. Son opiniones con las que coincido en gran manera. No quiero hacer de glosador de unos textos a los que ustedes mismos pueden acceder, así que a ellos les remito. El vídeo que acompaña la entradare coge la presentación, de la que les hablaba al comienzo, del "Manifiesto por una Europa postnacional y federal", en la London School of Economics. Y sean felices, por favor, a pesar del gobierno. Tamaragua, amigos. HArendt