Esto prueba sin duda, que el sol te pone feliz. No sólo liberas endorfinas cuando estás en contacto directo con la luz solar, sino que estás siendo bañado en Vitamina D, vital para evitar ciertos padecimientos.
Pero a veces ni la luz solar puede cambiar nuestro ánimo y es así como se siente este disco: soleado pero triste. Positivo pero melancólico. Prueba suficiente de que a veces ni el más rutilante de los rayos solares puede sacarnos de hoyo.
Sad Sunny Day