La reserva verde más grande del planeta sigue en llamas y el fuego alcanzó ya centros urbanos. La Amazonia arde porque el fuego, que se llama capitalismo, lo destruye todo. El pulmón más importante del mundo arde en llamas desde hace más de tres semanas sin que el gobierno de Jair Bolsonaro, del que depende gran parte de Amazonia, haya hecho nada para combatirlo o paralizarlo. Los siete del G-7, acordaban el pasado domingo el envío de una ayuda internacional a la mayor brevedad para paliar el desastre ecológico de Amazonia. La situación en la zona, con más de mil incendios, sigue sin control y las llamas han alcanzado ya Bolivia y Paraguay, países vecinos. Se calcula que ya se han quemado más de un millón de hectáreas y la selva amazónica se sigue consumiendo, duplicando la zona devastada en los últimos días. A la carrera, los bomberos se la juegan para evitar que alcance dimensiones incontrolables. En otros casos, es tan compleja la extinción que muchos de ellos se dan por vencidos mientras las llamas se acercan peligrosamente a las aldeas. La gente abandona sus casas con lo puesto. Situación de emergencia por la que el presidente de Bolivia se abrió a recibir ayuda internacional. En Brasil, más de mil nuevos incendios mantienen a seis estados ardiendo y se han desplegado 44.000 militares. Las calles de la capital de Bolivia y de Rio de Janeiro también se han incendiado de gentes que piden una respuesta. En Brasil los fuegos se han disparado más de un 80% por el drama de la deforestación. 200 años es la cifra que se marcan los más optimistas para recuperarse de este desastre medioambiental que fue el eje central del G-7. Francia propuso un fondo internacional cuanto antes y un plan para reforestar las zonas arrasadas. Pero las palabras de Emmanuel Macron presidente francés y de las de Jair Bolsonaro, presidente del Brasil, chocaron más que calmar los ánimos, provocando una agria polémica entre ambos y avivando las llamas en lugar de sofocarlas.
Toda esta confusión proviene del comentario sexista que hiciera Bolsonaro al burlarse del aspecto de Brigitte Macron por su edad. En concreto, un brasileño contestó a un internauta que pretendía comparar el aspecto físico de la esposa de Bolsonaro con la de Macron, una más joven que la otra. Bolsomaro contestó al montaje fotográfico de comparación con un “No lo humilles. Ja, ja, ja”, comentario que ha sido motivo de una crisis. Macron fue algo más elegante y simplemente arremetió contra la indignidad de Bolsonaro por sus palabras tan propias de otro tiempo: “Creo que los brasileños, que son un gran pueblo, tienen un poco de vergüenza de ver ese comportamiento y que esperan que, cuando uno es presidente, se comporte bien con los otros”. Y, como despedida, pidió a este pueblo que pronto tenga otro presidente salido de las urnas. En las últimas horas, Macron recabó apoyos internacionales y aunque esta crisis no pasará a mayores, en el ámbito diplomático está claro que marca el futuro de las relaciones entre ambas naciones, al menos en los próximos años, a la espera de un posible cambio de mandatario en ambas o en alguno de los dos países.
El jefe de Gabinete del presidente Bolsonaro anunciaba el pasado martes que no aceptarían los 18 millones de euros que los países del G-7 acordaron destinar para combatir los incendios que asolan la Amazonia. Bolsonaro exigió a Macron que pidiera disculpas a cambio de aceptar la ayuda. El gobierno de Brasil cree que el acuerdo climático es una conspiración del marxismo globalista que domina la ONU. Onyx Lorenzoni lo confirmaba en un blog del diario digital G-1, donde insistió en que la situación de los incendios está “bajo control”. Y cargó duramente contra el presidente francés, Emmanuel Macron, anfitrión del G7 e impulsor de esta ayuda en la cumbre, no sin grandes críticas a la política medioambiental de Bolsonaro, centrada en extraer minerales y madera de sus territorios amazónicos, algo que ya desató un enfrentamiento directo entre ambos líderes. Las palabras que Lorenzoni dirigió a Macron no difirieron mucho de las empleadas días atrás por el propio Bolsonaro, cuando acusó de “imperialista” al líder francés por introducir en la agenda del G-7 los incendios en la mayor selva del mundo y pulmón del planeta y deslizar la idea de que esta zona debería tener una “estatus internacional” para evitar que los Gobiernos favorezcan su deterioro. “Agradecemos [la ayuda], pero tal vez esos recursos sean más relevantes para reforestar Europa”, dijo el jefe del gabinete de Bolsonaro. “Macron no logra siquiera evitar un previsible incendio en una iglesia que es un patrimonio de la humanidad y ¿qué pretende enseñarle a nuestro país?”, afirmó Lorenzoni en tono desafiante, sobre el incendio que calcinó la basílica de Notre Dame de París, el pasado abril. “Tiene mucho que cuidar en su casa y en las colonias francesas”, añadió, refiriéndose a los territorios franceses en Latinoamérica, como la Guayana Francesa, fronteriza con Brasil. “Brasil es una nación democrática y libre y nunca ha llevado a cabo prácticas colonialistas e imperialistas como, tal vez, sea el objetivo del francés Macron. Casualmente, con altos niveles de rechazo interno”, agregó Lorenzoni. Sin embargo, en unas declaraciones posteriores, el propio Bolsonaro niega haber rechazado este dinero, pero exige a cambio que Macron se retracte por llamarle mentiroso. “En primer lugar, el señor Macron tiene que retirar los insultos que hizo contra mí. Primero me llamó mentiroso y, después, por las informaciones que obtuve, dijo que nuestra soberanía en la Amazonia era un asunto abierto”, afirmó el líder ultraderechista. “Para conversar y aceptar cualquier cosa de Francia, que sea con las mejores intenciones posibles, él tendrá que retirar esas palabras y entonces podremos conversar”, agregó. El asunto tiene en pie de guerra a la mayoría del Gobierno brasileño contra Francia en particular y contra Europa en general, que ve con preocupación el impulso maderero y minero en la Amazonia durante el corto mandato del ultraderechista Bolsonaro. ONG locales y las propias comunidades indígenas nativas de la selva han denunciado la impunidad de empresas extractivistas en la Amazonia con apoyo a dejación del Ejecutivo, que ve en la selva un recurso económico más que natural.
Entre el 18 y el 25 de agosto, en el bosque Chiquitano de Bolivia se quemaron más que 1.000.000 de hectáreas. Eso es más bosque del que normalmente se destruye en todo el país en tres años. Según los expertos, se necesitarán al menos dos siglos para reparar el daño ecológico causado por los incendios. Y más de 500 especies están en peligro por las llamas. “El bosque seco Chiquitano en Bolivia, o Chiquitanía –escribe en Público Claire F. R. Wordley, investigador asociado, en el departamento de zoología de la Universidad de Cambridge–, era el bosque seco tropical sano más grande del mundo. Ahora no está claro si conservará ese estatus. Este singular ecosistema es el hogar de los pueblos indígenas, así como de una fauna emblemática que incluye jaguares, armadillos gigantes y tapires. Algunas especies del Chiquitano no se encuentran en ningún otro lugar de la Tierra. Fotografías y vídeos de la zona muestran que muchos animales han muerto por el fuego. La región consumida por las llamas también abarca tierras de cultivo y pueblos, con miles de personas evacuadas y muchas más afectadas por el humo. Se están enviando alimentos y agua a la región. En muchos distritos donde la contaminación del aire duplica el nivel que se considera extremo, los niños no van a la escuela. Muchas familias siguen sin tener agua potable. Mientras que los medios de comunicación se han centrado en Brasil, los bolivianos piden al mundo que también tenga en cuenta su trágica situación y que envíe ayuda para combatir las llamas. Se cree que los incendios se iniciaron deliberadamente con el objetivo de limpiar la tierra para su aprovechamiento agrícola, pero se propagaron rápidamente hasta quedar fuera de control. No se ha identificado a los autores, pero el presidente boliviano, Evo Morales, ha justificado que se causen incendios, diciendo: ‘Si las pequeñas familias no provocan incendios, ¿de qué van a vivir?’. El desastre llega justo un mes después de que Morales anunciara una nueva medida destinada a aumentar la producción de carne de vaca para exportación. El Decreto Supremo 3973, aprobado en julio, permite la quema de tierras forestales. Veintiuna organizaciones de la sociedad civil están pidiendo su derogación. Argumentan que ha contribuido a causar los incendios y viola las leyes ambientales de Bolivia”. Los miembros del gobierno sostienen que prender fuego es una actividad normal en esta época del año y no está relacionada con el decreto. Morales ha afirmado repetidamente que la ayuda internacional no era necesaria. Tres aviones enviados por la vecina Argentina permanecieron en tierra durante días porque la administración se negó a dejarlos volar. Cambió su postura el pasado domingo 25 de agosto, cuando cedió al fin a las presiones y aseguró que aceptará la ayuda internacional.
Muchos advierten que los incendios podrían haberse contenido mucho antes con el auxilio de otros países. Numerosos vídeos muestran a voluntarios tratando de apagarlos con ramas, con equipos inadecuados y agua limitada. Algunos han sufrido desmayos por el fuerte humo. Los bomberos trabajan a contrarreloj para sofocar las llamas. Y, mientras los bomberos y los voluntarios luchan para hacer frente a las llamas soportando temperaturas de hasta 55 ℃, los bolivianos han organizado una recaudación de fondos para hacer frente a los incendios ellos mismos. Ha habido protestas en todo el país. Los manifestantes piden a Morales que solicite ayuda internacional y que revoque los decretos y leyes que han podido contribuir a provocar los incendios. Millones de personas reclaman al gobierno la derogación del Decreto Supremo 3973 y de la Ley 741, que permite las “pequeñas quemas controladas” en tierras agrícolas. Morales se enfrenta a unas próximas elecciones y ha recibido críticas por seguir haciendo campaña mientras los incendios se propagan. “Una actividad que, según indicó el domingo, dejará de lado durante una semana. Algunos líderes indígenas piden un juicio para determinar la responsabilidad de los incendios y la estrategia de respuesta más adecuada. Alex Villca, líder y portavoz indígena, ha asegurado: ‘El grupo coordinador de los pueblos indígenas de la Amazonia, Coica’, ha firmado una carta en la que responsabiliza tanto a Bolsonaro como a Morales por el ‘genocidio ambiental y cultural’ causado por los incendios. El presidente Morales llegó al poder en Bolivia, en 2006, respaldado por una plataforma de socialismo, derechos indígenas y protección del medio ambiente. En 2010 aprobó la famosa Ley de los Derechos de la Madre Tierra, que sitúa el valor intrínseco de la naturaleza al mismo nivel que el de los seres humanos. Su retórica ambiental ha sido fuerte, pero sus políticas han sido contradictorias. Morales ha aprobado la deforestación generalizada, así como la construcción de carreteras y la extracción de gas en los parques nacionales. Mientras que los incendios en el Chiquitano copan los medios de comunicación dentro del país, millones de focos más se avivan en Bolivia, enardecidos por la reciente sequía. No está claro si la respuesta a los incendios afectará al resultado de las elecciones de octubre, pero los ánimos se están caldeando en el país”.
Más que la amenaza de fuego en la Amazonia, hay quienes ven en Jair Bolsonaro la verdadera amenaza y creen que su Gobierno pone en peligro la lucha contra el cambio climático. Lo advierte Heriberto Ajaújo en El País: “De ser un país estratégico para mitigar el calentamiento global, ya que controla el 60% de la mayor selva tropical, el Brasil de Bolsonaro se ha convertido en un problema, porque los millares de fuegos y el repunte exacerbado de la deforestación confirman los peores augurios: que el presidente de extrema derecha está dispuesto a acabar con el mayor depósito terrestre de CO2 del planeta. Y ello pese a que el Gobierno brasileño haya recordado que ya ha enviado a más de 43.000 efectivos militares a la zona para combatir los fuegos”.
Luis M. García,
en su artículo “Messi y Cristiano no apagan fuegos en la Amazonia”, aparecido en Público el pasado 28 de agosto, dice que los miles de incendios que arrasan la Amazonia han llevado a muchos a ofrecer su ayuda, como ha hecho a nivel particular Leonardo Di Caprio. “El actor ha donado cinco millones de dólares a través de la fundación Earth Alliance, que esperemos que lleguen a la causa, porque también el G7 le ha ofrecido su ayuda a Jair Bolsonaro, veinte millones de dólares, y éste se la ha escupido a la cara en otra de esas actitudes poco medioambientales que caracterizan al presidente brasileño, inconsciente o no de que la Amazonia es patrimonio de todo el planeta, no solo de Brasil, donde se encuentra la mayor parte del pulmón de la Tierra. De Gran Bretaña parece que Bolsonaro sí va a aceptar ayuda, con condiciones, y de seguir reculando, tampoco rechazará la de otros, afortunadamente para todos. Pero los que no han donado ni un duro, seguro, ni tienen en su agenda hacerlo, y menos con aviones cargados con miles de litros de agua para acabar con los incendios, son Leo Messi y Cristiano Ronaldo. Lo confirma que no haya mención alguna por parte de ninguno de los dos y que sus círculos más próximos, agencias incluidas, desmienten u obvian la noticia falsa. Aunque no hacía falta. Porque han llegado desde Sudamérica a Facebook y otras redes varios letreros que cuentan, sin citar fuente alguna, lo generosos que son ambos futbolistas, que se plasma en que han pagado mucho dinero, no se sabe a quién, para ayudar a mitigar el desastre de la selva amazónica. ‘Qué grande eres Leo Messi. El mejor jugador del mundo una vez más demostrando que no es grande solo en las canchas. Tras las dos semanas que lleva quemándose la Amazonía decidió contratar cinco aviones de hasta 70 000 litros de capacidad para apoyar a controlar el incendio’, se dice del futbolista argentino del Barcelona.La situación en la Amazonia estalla contra la inacción de Jair Bolsonaro que, pese a sus reticencias, ha admitido el problema y ha destinado a cerca de 44.000 soldados a luchar contra las llamas. La cumbre del G-7 también ha sido un momento propicio para poner el foco en lo que está sucediendo, dejando al presidente de Brasil en mal lugar y pidiendo a todos los organismos competentes que actúen sin espera contra los focos que arrasan con el pulmón del planeta. La noticia ha salido publicada en todas las grandes cabeceras, preocupadas por la situación y analizando cómo avanza el fuego en la zona. Arturo Pérez Reverte, sin embargo, se ha fijado en otro detalle: “En España y en la mayor parte de los países de habla hispana, excepto en dos o tres americanos, siempre se dijo Amazonia. Desde hace unas semanas nos ha dado de pronto la fiebre por Amazonía y todo cristo la acentúa así. Empiezo a creer que en España nos echan algo en el agua”.
Fotomontajes, imágenes y frases sorprendentes de esta última semana:Del Humor Sindical
Alguien te lo tenía que decir. De Miguel Lázaro.
Publicación de Ponete feliz.
Publicado por Miguel Lázaro.
La sonrisa es una lengua universal
“Nuestra hija Xana ha fallecido esta tarde a la edad de nueve años después de luchar durante cinco intensos meses contra un osteosarcoma”, publicaba el pasado jueves el exseleccionador, Luis Enrique, en Twitter. Xana, la hija de 9 años de Luis. El técnico, quien entrenó entre 2018 y 2019 a la selección española, renunció a su puesto como seleccionador el pasado junio para dedicarse a su hija y acompañar al resto de la familia.
El humor en la prensa de esta semana: Peridis, Eneko, B. Vergara, Pat, J. R. Mora, Manel F., Javirroyo, Atxe…
Mora muestra en su humor de esta semana las dos mentiras descubiertas esta semana. “En la primera -dice en su web- Cayetana Álvarez de Toledo, diputada del PP y periodista, llevó al Congreso una proposición no de ley basándose en una noticia falsa que hablaba de que varias empresas de paquetería habían dejado de repartir en determinadas zonas de Barcelona por la inseguridad y aprovechó para pedir más policías. Todas las empresas lo negaron. Finalmente, el PP modificó su iniciativa y retiró la mención a las empresas de reparto”.
Los vídeos de esta semana:
La NASA muestra mapa de los incendios en la Amazonia
DiCaprio hace una donación para salvar el Amazonas | El Comercio
¿QUE CONSECUENCIAS TRAERÁ AL PLANETA EL INCENDIO DEL AMAZONAS?
Urgente ! INCENDIOS en AMAZONIA || Presidente Bolsonaro Dice