Aretha Franklin, la indiscutible dama del soul, y que todavía está entre nosotros, era el contrapunto perfecto desde la voz femenina, a los dos grandes monstruos de los años 60 en ese estilo, Sam Cooke y Otis Redding. Poseedora de una portentosa voz y como no, de un carisma a la altura de los mencionados.Su gran año discográfico, sobre todo en producción, es 1968, donde edita dos trabajos que le catapultan directamente al olimpo, Lady Soul y Aretha Now. Con el primero tuvo 3 de sus hits más incontestables, aunque tiene para mi canciones arrebatadoras dentro de un disco brutal. Pero hoy me centro en Aretha now, y en su tema I say a little prayer, donde Think fue un éxito rotundo, pero I say a little prayer demostraba que ella también sabía hacer medios tiempos descomunales.
Os dejo con la interpretación de I say a little prayer en The Cliff Richard Show de 1970.