Argentina comenzó el partido tocando la pelota hasta los 15 minutos del primer tiempo, donde no tuvo profundidad hasta una gran acción individual de Pastore, que recibió una infracción en el borde del área sobre el sector izquierdo.
Ahí la llave de la ventaja la tuvo Maxi Rodríguez, quien ejecutó un tiro libre preciso al segundo palo del arquero Patrick Onstad para estampar el 1 a 0 y, desde ese momento todo fue tranquilidad de Maradona y aplausos de los hinchas.
Ante la tibieza del rival, Jonás Gutiérrez dejó la línea de cuatro por derecha para sumarse a la línea de volantes y generar un poco más de fútbol, mientras Mascherano no tuvo trabajo en la marca y se dedicó a distribuir juego.
En ese contexto el peso de sus individualidades le alcanzó a la Argentina para que el último amistoso internacional antes de la Copa del Mundo se transforme en un entrenamiento.
Se sumó Tevez a la sintonía del resto de sus compañeros a la media hora de la primera parte, al abrir la defensa canadiense y cederle la pelota una vez más a Maxi Rodríguez, que convirtió su segundo tanto.
Con la victoria sellada a falta de 60 minutos, todos quisieron su gol. Esta vez fue el turno de Angel Di María, que remató de zurda, con tres dedos y de media distancia. Fue el 3 a 0 para hacer completo el festejo del Bicentenario.
Sobre el final del primer tiempo hubo susto por una falta que recibió Maxi Rodríguez, que fue la primera modificación en el inicio del complemento por precaución. En su lugar ingresó Juan Sebastián Verón.
El segundo tiempo fue de mayores celebraciones para el equipo argentino. Gonzalo Higuaín tuvo mayor participación en el ataque y, pese a no marcar, realizó la jugada previa al cuarto gol y asistió a Tevez para que anotara al minuto 17.
Maradona comenzó a hacer varios cambios y uno de ellos dio sus frutos. El Kun Agüero entró a los 26 del segundo tiempo y se anotó en el marcador con tan sólo 60 segundos en la cancha, luego de una acción individual y la definición al segundo palo del arquero.