No se apuren. El título no hace referencia a una gira turística. Ni tampoco a un partido entre selecciones menores clasificatorias de ningún mundial.
Armenia y Macedonia. Ahí las tienen. Dos naciones con las que tenemos en común cierto espanto económico que debería avergonzarnos, abochornarnos y sobre todo pensar que estamos haciendo. Pararnos de una vez y reflexionar sobre lo que estamos dejando.
Armenia, Macedonia y España tienen en común que los tres países son los que tienen la tasa de desempleo juvenil más alta del mundo. En el caso de España ya sobrepasa, según la última EPA, el 52%.
¿Alguien ha reflexionado sobre los efectos que estas cifras significan para el futuro?.
¿Alguien no ve que más de la mitad de los jóvenes no podrán acceder a una jubilación digna en un futuro porque no podrán llegar JAMAS a cotizar todos los años exigidos?. ¿Alguien no ve que en muy poco tiempo se van a juntar varias generaciones en un mismo hogar y todos ellos en situación de precariedad?: abuelos con jubilaciones menguadas, padres en situación de desempleo y sin ayudas por haberlas agotado y jóvenes en el mejor de los casos con empleos precarios. ¿Alguien no ve que se ha bloqueado las líneas vitales de emancipación de la juventud?.
No me creo que no se vea. Pero acabamos de destrozar a varias generaciones a las que les impedimos un futuro digno en este país. A unas generaciones, (paradógicamente, las mejores formadas de nuestra historia) a las que les estamos enseñando que la única salida que tienen es por aire, mar o tierra.