Aromaterapia y embarazo

Por Theresaader

La aromaterapia (del griego aroma, ‘aroma’ y therapeia, ‘atención’, ‘curación’) es una rama particular de la herbolaria, que utiliza aceites vegetales concentrados llamados aceites esenciales para mejorar la salud física, mental o ambas. A diferencia de las plantas utilizadas en herbolaria, los aceites esenciales no se ingieren sino que se inhalan o aplican en la piel.

El principal método de aplicación de los aceites esenciales es a través de una dilución en agua caliente, para que así el vapor del agua mezclado con las esencias se absorban por medio del aparato respiratorio.

Otra de las maneras de aplicación es a través de la piel, utilizando una mezcla de aceites esenciales con aceites vehiculares de acuerdo a la necesidad, ya que la piel se convierte en un vehículo y a la vez un protector para introducir los compuestos y propiedades que las plantas poseen, sin tener que correr riesgos de efectos secundarios nocivos.

Estos aceites penetran a través de los pequeños vasos capilares y son transportados a todo el organismo mediante el torrente sanguíneo. El tiempo promedio son 90 minutos y en algunos casos toma tan sólo 30 minutos. Se aplican directamente al área a tratar. También pueden combinarse entre sí y producir sinergias que hagan un efecto más potente.

Es importante señalar que los aceites esenciales no pueden aplicarse directamente sobre la piel ya que son altamente concentrados por lo que será necesario diluirlos en otros aceites o en agua.

Estas son algunas propiedades de los aceites esenciales más utilizados, indicados para embarazadas y lactantes:

Esencia de limón corteza. Es uno de los pocos que se pueden tomar incluso en las primeras semanas del embarazo.

Es un excelente antiséptico, sanea el ambiente y es muy indicado para aliviar náuseas, vómitos y otros problemas digestivos. También es indicado para combatir el mareo de transportes.

Dos gotas de esencia de limón en un poco de miel o de aceite vegetal. Tomar por vía sublingual (bajo de la lengua). 3 veces al día.

Existe un producto formulado con aceites esenciales muy eficaz. Se vende en farmacias. No aplicar en la piel. Es una esencia irritante y fotosensibilizadora.

.Esencia de mandarina corteza. Para combatir estrés, nerviosismo y trastornos del sueño. También tiene propiedades digestivas.

Ideal en difusión atmosférica: en un vaporizador de 100 ml añadir 100 gotas de mandarina. Agitar antes de pulverizar en el lugar donde nos encontremos y antes de ir a dormir.

En una compota de fruta, 2 gotas, tendrá un efecto relajante, calmante y ayudará a conciliar el sueño.

No aplicar en la piel. Es una esencia irritante y fotosensibilizadora.

Aceite de árbol de té. Este arbolito es un remedio tradicional de los aborígenes australianos. Al principio se hacía con él una infusión, de donde viene su nombre inglés “Tea tree”. Investigaciones recientes han señalado que su aceite puede combatir todo tipo de infecciones.

Es un potente anti-infeccioso, antiviral y antifúngico. Se ha comprobado científicamente que es eficaz para combatir el virus de la gripe (concretamente H1N1).

Se usará principalmente para tratar para problemas cutáneos como granos, acné, verrugas, pie de atleta, sarpullidos, picaduras de insectos, quemaduras y ampollas. Se utiliza para cortes y heridas infectadas y ayuda a que la piel se cure impulsando la formación de tejido cicatrizante. También contra la caspa, llagas frías e infecciones geritourinarias como cistitis y cándida bucal, y contra resfriados, gripe, catarros e infecciones de cualquier tipo. También se utiliza para bajar la fiebre, matar pulgas y piojos y como desodorante.

A pesar de que es un aceite esencial seguro, es recomendable su uso bajo supervisión de un especialista en aceites esenciales.

Precauciones: las personas con la piel sensible deben utilizar el aceite con cuidado.

Aceite esencial de ravintsara (cinnamomum camphora quimiotipo cineol). A partir del segundo trimestre.

Ideal para prevenir resfriados y gripes. Refuerza el sistema inmunitario y es un potente antiviral.

Para prevenir infecciones virales en periodos sensibles: 2 gotas de AE de ravintsara mañana y noche en la parte interna de las muñecas. Se aplica puro.

En caso de resfriados aplicar 2 gotas de AE de ravintsara puro, en el pecho y la espalda. Tres veces por día hasta mejoría notable.

Se puede sustituir el aceite esencial de ravintsara por aceite esencial de eucalipto radiata (pero NO por el eucalipto globulus) o por aceite esencial de mandravasarotra (cinnamomum fragrans).

Existe una gama de productos formulados con aceites esenciales muy eficaces para tratar los síntomas del resfriado. Se venden en farmacias.

Aceite de lavanda: es indispensable en casa. es un aroma dulce y el más usado atribuyéndosele propiedades antisépticas, “afrodisíacas”, relajantes, reconstituyente de tejidos y antipirético.

Igualmente está indicado para una infinidad de pequeños problemas de salud. Nos ayudará para aliviar cualquier tipo de dolor, para limpiar y cicatrizar heridas, para quemaduras y eczemas. Alivia contracturas musculares y dolor de cabeza. Es relajante, ayuda a conciliar el sueño y es antidepresivo.
Se puede usar puro. Se utilizan un par de gotas por aplicación.

Pero debemos saber que la mayoría de los aceites esenciales están estrictamente prohibidos durante el primer trimestre de embarazo, según explica la farmacéutica y autora de varios libros sobre aromaterapia, Daniele Festy. La razón de esta restricción es simple: los aceites esenciales pueden alcanzar la placenta y dañar el feto; incluso pueden inducir abortos espontáneos y hasta llegar a la leche materna.

“Lo más importante para la embarazada es utilizar un aceite que no le provoque alergia y evitar aplicar aceites foto- sensibilizantes (cítricos), ya que tienen un carácter más irritativo y pueden provocar manchas en la piel. Por ello, hay que usarlos siempre muy diluidos”.

Según la aromatóloga Antonia Jové, en el caso de las mujeres embarazadas o durante la lactancia, la aromaterapia aporta soluciones eficaces y resultados rápidos, pero siguiendo algunas pautas:

  • No usar aceites esenciales durante los 3 primeros meses del embarazo salvo productos formulados especialmente para ese propósito.
  • A partir del segundo trimestre de embarazo se favorecerá la vía externa, la vía oral se reservará para casos de infecciones y bajo supervisión médica. Como norma general se descartará sistemáticamente el uso de aceites esenciales que contengan cetonas en porcentajes elevados.
  • En aplicaciones tópicas se evitará la cintura abdominal y la zona dorsal/lumbar.
  • No usar los siguientes aceites esenciales durante el embarazo y la lactancia:
    • Salvia officinalis ssp officinalis (salvia oficinal)
    • Cedrus atlantica (cedro del Atlas)
    • Rosmarinus officinalis qt alcanfor (romero qimiotipo alcanfor)
    • Hyssopus officinalis ssp officinalis (hisopo oficinal)
    • Mentha x piperita (menta piperita)
    • Lavandula stoechas (cantueso)
    • Mentha pulegium (poleo)
    • Eugenia caryophyllus (clavo de especie)
    • Satureja montana (ajedrea)
    • Origanum compactum (orégano)
    • Thymus vulgaris qt timol (tomillo quimiotipo timol)
    • Trachyspermum ammi (ajowan)
    • Cinnamomum cassia (canela de China)
    • Cinnamomum verum corteza (canela corteza)
    • Cymbopogon martinii var. motia (palmarosa)
    • Thymus vulgaris qt geraniol (tomillo quimiotipo geraniol)
    • Monarda fistulosa (monarda fistulosa)
  • Se recomienda considerar los aceites esenciales como medicamentos aromáticos naturales y usarlos cuando es estrictamente necesario. Evitar un uso cotidiano frecuente o sistemático.
  • Respetar escrupulosamente las posologías y duración de tratamiento.

Recomendaciones:

  • Existen productos formulados a base de aceites esenciales autorizados durante el embarazo. Pide consejo a tu farmacéutico.
  • Las personas con alergias deben realizar un test antes de usar cualquier aceite esencial o producto a base de aceites esenciales. Este test consiste en depositar unas gotas en el pliegue del codo. Si no hay reacción cutánea al cabo de 15 minutos se puede seguir adelante con el tratamiento.
  • Lavarse las manos después de utilizar aceites esenciales.
  • Respetar las dosis indicadas.
  • Usar siempre aceites esenciales quimiotipados (sello AEQT) y asegurarse de la calidad irreprochable del laboratorio que los distribuye. Se recomienda que se compren en la farmacia bajo consejo de su farmacéutico.

De: wikipedia, http://www.sabervivir.es/, http://hornillosyaceites.blogspot.com.es