Es amplia la evidencia que une nuestras Américas. Una parte de ella se observa en los vestigios de las civilizaciones desaparecidas, que aún dejan huella en nosotros, y que presenta evidencias a través de los monumentales edificios y obras hidráulicas que hasta nuestros días podemos visitar. La agricultura ha sido la herramienta que ha dado lugar a la hidráulica, la cual a su vez ha otorgado las herramientas para que nuestra civilización desarrolle al punto actual. En las zonas áridas de nuestro continente, la lucha de la agricultura contra las condiciones climáticas áridas extremas ha dado origen a inteligentes soluciones que hasta hoy pueden observarse desde los vestigios aztecashasta los tiwanakotas, en el Altiplano boliviano Lee el artículo completo »