Que a veces soñemos con boicotear el estreno de las entregas de Crepúsculo, vale, pero de ahí a que alguien planee realmente entrar a una sala de cine con dos rifles de asalto y unos 400 cartuchos el día del -previsible multitudinario- estreno de la última película de la franquicia, es ya sobrepasar cualquier límite. Tal y como pasó en el caso del tiroteo de Denver con The Dark Knight Rises, otro chiflado pretendía repetir masacre, esta vez en Missouri, suerte que la madre del joven de 20 años comenzó a sospechar y recurrió a las autoridades para denunciar al chico, quien confesó su plan. El chaval ha sido acusado de tres cargos, entre ellos el de amenaza terrorista, y tendrá que pagar una fianza de 500.000$. ¡Y que no espere que le devuelvan el dinero de la entrada que había comprado!
Bromas aparte, esperemos que este tipo de sucesos no vuelvan a repetirse, ninguna película, por muy infame que nos resulte, merece un final tan trágico.
Podeís leer la noticia completa, foto del detenido incluida típica del amarillismo americano, aquí.