INVASION! (30 DE NOVIEMBRE DE 2016) -AVISO SPOILERS-
El eslabón más débil, para mí, del crossover que une las series de Supergirl, The Flash, Legends of Tomorrow y Arrow era claramente esta última, la ficción sobre el arquero verde. Las aventuras de Oliver Queen (Stephen Amell), en sus primeras temporadas, eran serias hasta el ridículo, con guiones incoherentes y con interpretaciones no demasiado logradas. Algo así como un culebrón -una soap opera- con superhéroes. Pero hay que admitir que, con cada entrega, la serie ha ido mejorando -sobre todo tras la aparición de The Flash- dejando de lado los aburridos conflictos familiares de la familia Queen, introduciendo momentos de humor -gracias Felicity (Emily Bett Rickards)- acumulando gente disfrazada y apoyándose en su mayor baza: las escenas de acción y las peleas. En esta quinta temporada, Arrow se ha renovado completamente con nuevos personajes: Mr. Terrific, Ragman, Wild Dog, Artemis y Vigilante; han eliminado el romance entre Oliver y Felicity; han sustituido los conflictos familiares por algo parecido a una intriga política -Oliver es el alcalde de Star City- y han mejorado considerablemente los prescindibles flashbacks introduciendo como villano al grandísimo Dolph Lundgren -Rocky IV (1985), Masters del Universo (1987) y Soldado Universal (1992)-.
Arrow sigue sin ser una buena serie, pero al menos resulta entretenida con estos cambios.