Arroz con leche

Por El Mojojón Verde

El primer recuerdo que tengo del arroz con leche es el que preparaba mi Amatxi, mi abuela, la madre de mi padre, que lo preparaba de postre los fines de semana que venía mi tía de Pamplona a Las Arenas y nos reuniamos toda la familia para comer los domingos.
El siguiente recuerdo que me viene a la cabeza es el que probé en Asturias hace unos años, concretamente en el Naútico de Gijón durante una regata que organizaba la sidra el Gaitero, fue entonces cuando me enteré que el arroz con leche era un postre asturiano y que sinceramente sin querer desmerecer a nadie no tenia que ver nada con el de mi Amatxi, que estaba muy bueno pero aquello no era lo mismo.
Aqui os dejo la receta de uno asturiano, cremoso, meloso y estupendo.
Ingredientes
100grs de arroz
1,5 litros de leche entera, si puede ser fresca, mejor
250grs de ázucar
50grs de mantequilla
1 trozo de cascara de limón y otra de naranja
1 palo de canela
1 chorro de anís
1 pizca de sal
Entre 2 y 3 horas de paciencia
Lo ideal para preparar un arroz con leche es hacerlo en paralelo, es decir, hacerlo mientras preparamos alguna otra cosa para poder dedicarle la atención necesaria sin la necesidad de estar exclusivamente en la cocina pendiente de este.
En primer lugar, en un cazo pondremos el arroz con un poco de sal y lo cubriremos con agua, le daremos un ligero hervor para así quitar el almidón y lo colaremos.
En otra cazuela pondremos la leche, las cascaras y la canela, cuando rompa a hervir reduciremos el fuego y añadiremos el arroz, la mantequilla cortada en trozos y lo dejaremos a fuego lento durante 10-15 minutos para que la mantequilla y la leche se mezclen, entonces añadiremos el azucar. Ahora deberemos esperar entre 2 o 3 horas hasta que este en el punto que nos guste, a unos mas cremoso y a otros mas espesito, cuando lo tengamos casi hecho ya al final, añadiremos un chorro de anís, recordad que durante todo el proceso deberemos revolver con frecuencia para que no se nos quede el arroz pegado al fondo.
En esta ocasión lo hemos servido con canela, pero mucha gente lo prefiere cubierto de azucar quemado, a mi personalmente no me gusta, pero ya se sabe, para gustos los colores.