Hoy os traigo la primera novela de un autor novel, aunque creo que en breve sacará su segundo libro: Arrugas que no levantan polvo, de Javier Villena Carrillo.
Debo confesar, y que me perdone Javier, que, en principio, la temática del libro no me atraía demasiado (no voy a especificar mucho, al final de la entrada podréis ver el resumen), pero... tras ver muy buenas reseñas en varios lugares (sobre todo en un grupo de lectura de Facebook) me pudo la curiosidad y decidí leerlo y, ciertamente, no me arrepentí.
La trama de la novela no es nueva: amor/desamor, conflictos familiares, miedos, inseguridades y arrepentimientos. De hecho, me ha recordado mucho a la novela popular publicada en España a partir de los '40-'50 y, dentro de ésta, sobre todo, a la prolífica escritora Corín Tellado (sí, por trabajo he leído unos cuantos libros de esta mujer, jeje). No obstante, era una historia tan común por aquél entonces que bien podría tratarse de la vida de nuestras abuelas, de nuestras madres o, incluso de la nuestra si hubiéramos pasado nuestra juventud en los años sesenta, años en los que se ambienta la novela (concretamente en el año 1967). Además, por suerte, Javier ha sabido darle un toque más actual y más fresco.
Con el firme propósito de emocionar, el escritor nos cuenta la historia de amor de los dos jóvenes protagonistas: Heliana y Claudio (que sirven, a su vez, como telón para narrar otra, la de la madre de Claudio) y lo consigue a base de un lenguaje muy cuidado, acorde a la época, y tierno; de situaciones muy cercanas y cotidianas y de hacer que empatices con cada uno de los personajes.
Asimismo, no sé si siendo muy consciente de ello, el autor también cumple con el propósito de dar a conocer una época y un estilo de vida que a algunos nos queda un tanto lejano: la imposición de los padres, la forma de relacionarse de las familias, el papel de la mujer en la sociedad, el sentido del honor y la decencia, las maneras de conquistar y del galanteo, la división entre clases sociales..., vamos, un compendio de situaciones que, afortunadamente, hemos superado (o medio superado), pero que nos hacen recordar que no siempre todo fue igual.
Resumen: En la España de los sesenta, en Luque, un pueblo de la subbética cordobesa, dos jóvenes hasta ahora ajenos al resto del mundo tendrán que tomar la decisión más importante de sus vidas.
Heliana, de 17 años, nacida en el seno de una reputada familia, observa impotente cómo sus padres deciden por ella y la empujan sin compasión hacia un futuro perfecto para ellos pero colmado de imperfecciones para ella. Su felicidad sucumbe ante el poder, la política y, principalmente, su propia persona por el hecho de ser mujer.
Claudio es un chico de ciudad, en apariencia débil, turbado por su especial problema de comunicación y cuyo pasado se lo arrebató de cuajo una inesperada tragedia familiar que le obligará a vivir en Luque en casa de sus tíos. La convivencia con ellos y sus dos primos gemelos, Adrián y Martín, se verá enturbiada por las muchas preguntas que hasta entonces dormían olvidadas entre sus recuerdos y que sin embargo renacen empujadas por un misterio de dudas, intrigas y mentiras que pondrán su vida en peligro.
Todo cambia cuando esa magia que muchos llaman destino, en uno de sus caprichos, concierta una cita al azar y, sin más ayuda que el enigma del amor, consigue que la amistad que surge entre ambos se transforme en un juego de adultos y los dos protagonicen una historia de amor, pasión y sentimiento por la que tendrán que sacrificar lo que más desean.
Una historia que se llena de amor para vaciarse de todo.