Art Nouveau y Masonería en Alphonse Mucha

Alphonse Mucha. Fotomontaje: Masonic Encyclopaedia's

Ahora que se acercan las vacaciones de verano en el hemisferio norte, resulta una buena excusa para visitar algún país o ciudad europeos. Praga nos ofrece a los admiradores del  arte un plus añadido para los que pertenecen a la Masonería o son amigos de ésta.
El nombre de Alphonse Mucha está ligado a ambas cosas: arte y masonería. El Museo Mucha de Praga es cita obligada para los amantes del Art Nouveau. 
Pero hay más. El Museo Masónico de Praga nos ofrece, además de una importante colección de diplomas, certificados, medallas o joyas, impactantes cristalerías y cerámicas, sellos de logias, etc., un tour para ver toda la simbología o símbolos masónicos que la ciudad ofrece. El cuadro “El francmasón” de Mucha puede ser admirado en la calle Dittrichova, 9.
Todo ello se convierte en un auténtico reclamo.  Os dejamos con esta sucinta biografía de Alphonse Mucha y un vídeo de su obra.  
Alphonse Mucha se convirtió en París en uno de los más grandes representantes del Art Nouveau, gracias a un cartel publicitario que realizó para Sarah Bernhardt y su obra teatral 'Gismonda'. A partir de ese momento sus carteles, joyas, cuadros y escenografías alcanzan una gran popularidad. Por esa misma época Mucha se inició en la Masonería.
1906 viaja a América para dar clases y realizar carteles para otra actriz del momento. 
Al acabar la Primera Guerra Mundial regresa a su tierra natal. Cuando Checoslovaquia se independiza en 1918 Mucha, a instancias del gobierno de la nueva república trabaja en el diseño de sellos, billetes y en las veinte pinturas monumentales  de “La épica eslava” o una vidriera de la Catedral de San Vito. 
En ese período llegó a Gran Maestro de la Gran Logia de Checoslovaquia.
En 1921 expondrá su obra en el Museo de Brooklyn, en Nueva York.
Con la ocupación Nazi en 1939 de Checoslovaquia, Alphonse Mucha es detenido por la Gestapo por masón, progresista y patriota checo.  En prisión contraería  una neumonía de la que moriría el 14 de julio de 1939, a pesar de haber sido puesto en libertad. 
Había nacido 79 años antes, el 24 de Julio de 1890, en Ivancice (Moravia) a la sazón perteneciente al Imperio Austrohúngaro.
Estando en Viena como pintor de escenografías teatrales,  vuelve a los 20 años a Moravia donde sigue viviendo de sus obras, las cuales llaman la atención del  conde Kart Khuen que le confió la restauración de su castillo. Impresionado por su trabajo Khuen decidió correr con los gastos de estudiante de la Academia de Bellas Artes de Múnich, desde donde Mucha se trasladó a París, faro de la cultura y el arte del momento, donde conquistó la fama.