Arthur Christmas: Operación regalo

Publicado el 19 diciembre 2011 por Serreina
No os dejéis engañar por su título, ni por la sinopsis que habéis podido leer, esta película, entra directamente en el cine familiar con calidad. Una nueva apuesta del prestigioso estudio británico Aardman, con su segunda película en animación por ordenador.
La trama es muy típica de estas fechas, pero no deja de contener múltiples sorpresas, y nuevas ideas. Santa Claus, es un puesto que se hereda de generación en generación, y el actual, ya cuenta con 70 años a sus espaldas de oficio. Su relevo natural parece ser Steve, hijo de Santa, y que ha llevado la tecnología más eficiente para el reparto de los regalos a los millones de niños en todo el mundo en una sola noche. Para ello, se sirve de una moderna nave, en la que miles de elfos junto a Santa, cumplen su misión. Pero este año, han tenido un descuido, y se han olvidado del regalo de la pequeña Gwen. A Steve, no parece importarle tan insignificante fallo, y así lo transmite a su padre, menos mal, que Arthur, el otro hijo de Santa, es un loco del espíritu navideño, y emprende una aventura junto a su abuelo, para hacer llegar el regalo a Gwen, antes de que esta despierte.
La película esta llena de ingeniosos gags, que hacen disfrutar a todas las edades por igual. Y además lo hacen de una manera inteligente, y no se limitan a los típicos chistes de este tipo de películas (impagable el momento en el que el abuelo Santa, reconoce que un fallo suyo, pudo desencadenar la crisis de los misiles cubanos, o cualquiera de las escenas de recogimiento familiar de la familia Claus). Desde luego Aardman, y la directora de este film Sarah Smith, han dado en el clavo, y como he dicho al principio, el título puede llevar a engaño, pues parece la típica sosería de estas fechas, cuando no es así. Vale que si sea el producto típico, pero dotado de ingeniosidad e inteligencia, y permite disfrutar de cine familiar de calidad, algo de lo que desgraciadamente, salvo honrosas excepciones, están algo escasos.
La recomiendo encarecidamente, sobretodo, si tienes hijos, es una buena manera de compartir un estupendo rato de cine, fuera de otras ñoñerias que no permiten disfrutar por igual a todos los miembros de la familia. Una pena que la película no haya tenido la suficiente campaña de publicidad para llevarla al número uno, y poder hablar de un clásico instantáneo de estas fechas (aunque el tiempo, suele poner las cosas en su lugar).