De hecho, desde Bruselas se impone a los países como Grecia, Portugal, Italia y España que practicamente vivan por y para el turismo.
Por esa razón es un suicidio para el sur de Europa, la Unión Europea, Cataluña y sobre todo España que la región más singular de nuestro país se independizara. Cuanto más diverso es un país, cuantos más contrastes y diferencias existen más perfecta es la sociedad. En consecuencia, es menester que se consiga que España vuelva a una situación política estable, y esto pasa por conseguir que en Cataluña haya gobierno y un presidente lo antes posible.MEJOR OPCIÓN
La mejor opción es Inés Arrimadas, pero para conseguirlo, ella, tiene que acercarse a un votante clave, no al urbanita sino al electorado femenino de las zonas más rurales de Girona y Lleida. Para conseguir que Cataluña recupere la normalidad y vueva a ser la mejor región de España y que Barcelona por ejemplo, siga siendo un centro cultural clave no solo de Europa sino del mundo, la líder de Ciudadanos en Cataluña, Inés Arrimadas, debería acercarse a ese electorado femenino que no ha salido de comarcas rurales del norte de Cataluña y que no tienen una clara conciencia del mundo exterior. Los líderes políticos mediocres se suelen aprovechar de la incultura y el miedo para gobernar. Sin embargo, del mismo modo que desde el resto de España se puede ver a Cataluña de forma adversa, incongruente, extraña y hasta con miedo, ese mismo tipo de persona habita en zonas rurales del norte de Cataluña y pueden ver con extrañeza a una mujer como Inés Arrimadas como presidenta de Cataluña. Inés Arrimadas ya ha hecho historia pero haría muy bien al mundo, España y Europa si se convirtiera en presidenta de Cataluña.