Norman Osborn ya tiene su Stanford. Y Bendis la excusa para que regresemos al status quo anterior a Vengadores Desunidos. Porque, aún sabiendo del interés del crossover y la espectacularidad del mismo, lo único que ocurre es que el Universo Marvel no puede continuar indefinidamente con sus héroes favoritos como fugitivos. Con Asedio, tenemos la oportunidad de que vuelva todo a como tiene que ser. O mejor, claro.
A decir verdad, la forma en la que comienza a gestarse el conflicto me lleva a una reflexión:
-Norman Osborn se comporta de la misma forma que Lex Luthor. Los dos, una vez alcanzado el poder, parecen seguir luchando contra sus fantasmas. En el caso del segundo, terminó por luchar en forma de “Transformer” con Superman, mientras que el primero, también bajo la brillante armadura de caballero, se lanza contra Asgard.
La imagen es, desde luego espectacular. Como lo es la converación entre los miembros de Los Vengadores Oscuros con Osborn, donde cada uno de los miembros comienza a darse cuenta que se lanzan a un suicidio. Son psicópatas pero no idiotas.
Para entender por qué Asgard es una amenaza, no hay mas que buscar al consejero mas cercano de Osborn: Loki. El Dios de la Mentira, juega con Muerte, con Balder y con Osborn. Su plan, que tiene un plan, es que se destrocen entre ellos. En los últimos números de Thor, hemos visto como Muerte experimentaba con asgardianos para acabar enfrentándose al Dios del Trueno, en un combate en el que Muerte utilizaba al Destructor. Espectacular dibujo de Tan, pero con un argumento que parece que pudo dar mas de sí del que dió. La cuestión es que los asgardianos dejan Lavteria y vuelve a los USA. Loki, además, juega a dos bandas; Avisa a los suyos del inminente ataque, de forma que no parece el traidor que todos saben.
Los primeros compases, con un Vigía desatado, nos llevarán a ver la intervención de Thor. Aunque exiliado (aunque ayudara a combatir a Muerte siguen rigiendo las leyes asgardianas), no puede apartarse mientras es testigo del ataque. La imponente fuerza de ataque de Osborn, pondrá en jaque al mismísimo Dios del Trueno.
Finalmente, nos preparan para el regreso de Steve Rogers a la acción y de Tony Stark. El primero, con un espectacular fin de número y, el segundo, sabiendo que está en el mismo lugar donde descansa Asgard. Hasta allí fue llevado según su testamento vital.
No quiero terminar si ver la relación entre Utopia y Asedio. En el primer casso, eran los mutantes quienes le ensombrecían, le estorbaban hasta tal punto que convirtió a San Francisco en campo de batalla. Solo la huída de los mutantes, hizo posible el final del combate. Pero su ego no le deja que otros le hagan sombra, y elige a los asgardianos como su objetivo.
Asedio es, por tanto, la caída de Osborn, como Invasión Secreta supuso su auge.
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