El partido termina, las celebraciones se extienden por todos lados, petardos, bocinas, claxon de coches,multitudes gritando, era un maremagnum de sonidos que invadía los sentidos, el aspecto fantasmagórico que había tomado la ciudad mientras se disputaba el partido se ha convertido en una explosión de color rojo, parecía un anuncio de navidad de Coca Cola de esos en los que todos cantan y ríen. Pero no todos estaban celebrando el acontecimiento histórico, en un pequeño cuarto del hotel Le Soulier d'or una jefa de seguridad estaba revisando todas las imágenes que se habían grabado en el momento en que España había marcado el gol.
Todo el personal de vigilancia estaba inspeccionando cada habitación del hotel y cada zona de servicio en busca de algo fuera de lo normal, Sofía les había dicho que era por precaución no se había atrevido aún a decirle a nadie la sospecha que albergaba, ¿había sido un disparo lo que escucho?, no estaba segura pero prefería pecar de precavida que de negligente.
El salón estaba vacío, hacía rato que la celebración había terminado aunque se podían escuchar los ecos de los últimos cánticos, lejanos como el recuerdo de un dulce sueño que se escapa de los dedos. Sofía salía por la recepción del hotel cuando tiene una corazonada de esas que a veces nos asaltan cuando menos lo esperamos, sin saber a ciencia cierta porque lo hacía se dirigió al servicio de señoras, sabía que había sido revisado en 2 ocasiones y la cámara que había en el pasillo no grabó nada sospechoso, pero fue guiada por un súbito impulso.
Al llegar a los lavabos no encontró nada raro, lo revisó todo con la profesionalidad eficaz de alguien que es un perfeccionista en su trabajo, por lo que al terminar su escrutinio se limpió las manos, se las acercó a la cara para olerlas y se dispuso a salir para volver a casa. Utilizó el pasillo de personal, tenía prisa por irse a descansar y no se quería encontrar con nadie que la entretuviera.Al pasar al lado del montacargas notó un olor peculiar, se parecía al jabón que usó antes pero este es más intenso y con algunos matices más penetrantes. Le picó la curiosidad entró en el montacargas y se fue parando en cada piso en busca del peculiar aroma, al llegar a la planta ocho vuelve a percibir la extraña fragancia, parecía que venía de uno de los carros usados por las camareras de piso, se acercó para investigar, en el en una bolsa encontró un bote vacío y un uniforme, que no deberían estar allí….
Continuará ….
Capítulo primero