Il Mostro di Firenze o el Monstruo de Florencia es el nombre que la prensa le dio al autor de ocho asesinatos dobles que tuvieron lugar en la ciudad italiana en el periodo de 1968 al 1985. Convirtiéndose así en el primer caso de un asesino en serie de la historia italiana capaz de igualar a asesinos reconocidos mundialmente. La manera de operar de este asesino siempre fue la misma disparando a parejas de jóvenes utilizando la misma arma, un calibre Beretta 22 Long Rifle cargado con balas de la serie H de Winchester, y posteriormente mutilando con mucha determinación los órganos sexuales de sus víctimas mujeres. En 2001, algunos investigadores reanudaron el caso de “Il Mostro di Firenze” sin querer dar demasiadas explicaciones afirmaron que tenían nuevas pistas que los conducían a pensar que el “Monstruo de Florencia” podía tratarse de miembros de una secta religiosa, un grupo de aproximadamente 10 personas adineradas, que ordenaban y pagaban los asesinatos a los campesinos. Finalmente, a pesar de los numerosos intentos de las autoridades italianas y después de interrogar a más de 100.000 sospechosos nunca se halló al culpable.
El Asesino de las llantas planas (The Flat-Tyre Murderer) o Asesino de South Dade fue el nombre que le dieron al asesino al que le atribuyeron 5 muertes en Florida y que es sospechoso de hasta 30 casos más. Su modus operandi se caracterizó por desinflar los neumáticos de los vehículos de las víctimas y de ofrecerles asistencia para luego asesinarlos con una combinación de disparos, heridas de arma blanca, como picahielos, y traumatismos por golpe de martillo al punto que las víctimas no podían ser identificadas. Nunca se hizo un arresto y las únicas pistas que tenía la policía fueron características del asesino como su coeficiente intelectual por encima del promedio, y una fuerza y destreza superiores a la media.
Gracias por leer. Si te gustó, califícalo.
Esta es la segunda parte, lee la primera parte aquí