¿Qué hay que hacer para ser nombrado asesor y vivir como un rajá? ¿Qué estudios debe uno cursar para ser tan positivamente recomendado? O ¿qué parentesco convierte a alguien en privilegiado? “El Gobierno –reconoce David Jiménez– admite que una parte de los 578 asesores del presidente Rajoy no tienen el graduado escolar. No dice quiénes son o a qué se dedican esos consejeros, pero solo un mal pensado sospecharía que entre ellos pueda haber amigos del partido y sobrinos bien recomendados. Seguramente no se pudo encontrar a gente con mejor currículo entre los seis millones de desempleados del país. O entre las decenas de miles de profesionales con experiencia que han tenido que exiliarse en busca de trabajo.
“La alcaldesa de Madrid tiene siete veces más ‘cargos eventuales de libre designación’ que su homólogo de París y basta ver cómo rige la ciudad para concluir que no le vendrían mal algunos extras. En la Rioja hay un asesor por cada 6.500 habitantes y tampoco allí marchan las cosas. Andalucía gasta nueve millones de euros al año en recompensar el esfuerzo de los suyos, sin que se haya logrado sacar a la región de entre las más subdesarrolladas de Europa. Y así hasta sumar los 17.000 asesores que según una investigación, trabajan en España. Parecen muchos, pero hacen falta más.
“Una de las nuevas incorporaciones –concluye D. Jiménez– debería ser un asesor que asesore sobre cuántos asesores deben seguir asesorando a los asesorados para que tanto asesoramiento produzca al fin algún resultado. ¿A cuántos sobrinos más hay que colocar para que se resuelva el problema del paro? ¿A cuántos lameculos es necesario poner en nómina para llevar al país por el camino de la meritocracia, donde los puestos se alcancen en función de la excelencia y no por tener carné del partido? ¿A cuántos no graduados de secundaria hay que dar una legítima oportunidad laboral en Moncloa para que, con su experiencia en el fracaso escolar, logren mejorar la educación? ¿Cuántos hacen falta para convencer a los políticos que llevan años exigiendo sacrificios que se apliquen alguno? Que nos digan cuántos asesores más necesitan. Que se contrate a los que haga falta. A dedo. Ya”.