Portada de Así empieza lo malo
"Así empieza lo malo" es la historia de un matrimonio otrora feliz que vive instalado en un relación enferma y decadente, es la historia de unos personajes que estrenan libertad sin haber superado un pasado oscuro y silencioso, es la historia de un jóven que empieza a vivir a través de las vidas de otros. Es la historia de todos ellos, es la historia de cualquiera. Es la historia de una intimidad de puertas para adentro y es la historia de una mirilla a esa intimidad y la de quien por ella se asoma."...los dos eran duchos en sostener sus diálogos casi en susurros y templar sus enfados, de manera que no molestaran ni despertaran a nadie. Quizá también para que su historia fuera una historia tenue y nunca contada, como no suelen contarse las de la vida íntima, y así sólo quedara a la vista del soñoliento ojo entreabierto. Pero a ese ojo se le habían añadido aquella noche los míos, soñolientos pero bien abiertos, y en absoluto fríos."El joven Juan de Vere comienza a trabajar como secretario del antaño exitoso director de cine Eduardo Muriel. De Vere admira a Muriel y a Muriel le cae bien de Vere, de manera que el muchacho cada vez pasa más horas en la casa de su jefe, más incluso que en la suya propia. Comienza a difuminarse y a mimetizarse con el ambiente de esa casa. Ese ambiente se extiende al círculo de amistades del director de cine pero también incluye a la mujer de éste, Beatriz Noguera. Con ese poder que otorga el estar presente sin apenas ser percibido, Juan asiste desconcertado e intrigado al trato vejatorio que Muriel propina a su esposa. Esa discreción y versatilidad de la que hace gala el joven de Vere, son también las que hacen a su jefe confiarle una misión que se extralimita de sus funciones laborales. Le pide que averigüe, le insta a que investigue. ¿A quién? A un amigo del propio Muriel ¿Por qué? Porque le ha llegado un rumor, una 'verdad' sin confirmar sobre comportamientos indecentes de ese amigo, y necesita saber, necesita corroborar o disipar la duda.
Javier Marías elige a Juan de Vere como narrador en primera persona de su novela, y os aseguro, pajaritos, que no ha podido tener mayor acierto. De Vere cumple el encargo de su jefe, pero comienza a tomarse licencias propias. Además, no es éste el único asunto que despierta la curiosidad del joven secretario. Le sorprende que un tipo tan cordial con todo el mundo como es Muriel, sea tan taimado e incluso cruel con Beatriz, más aún cuando presiente que en otro tiempo fueron una pareja feliz. No puede evitar interesarse por el motivo de la deriva de ese matrimonio. Con ese sutil arte que cultiva de ver sin ser visto, comienza a espiar a Beatriz, comienza a seguirla.
Errol Flynn. Foto de kate Gabrielle
Sí, lo confieso, yo tampoco he podido evitarlo. En los escasos momentos en los que el autor me ha permitido despegarme de sus páginas no he podido evitar tachar a Juan de Vere de cotilla y fisgón. Pensabais que iba a decir que yo tampoco he podido evitar sujetar mi curiosidad, ¿verdad? Pues tampoco, lo reconozco, me reconozco cotilla y fisgona, al menos en cuanto a libros se refiere. Pero, ¿acaso no todos lo somos? ¿O acaso no queréis saber de qué indecencia se acusa al amigo de Muriel? ¿No tenéis la duda de si realmente la cometió? ¿No os morís de ganas por conocer qué tan mal le hizo Beatriz a su esposo para que éste sea incapaz de perdonarla aun transcurridos tantos años? No hace falta que contestéis. Ya conozco la respuesta, mis pajarillos cotillas.Beating time, de Howard Dickins
Así que ya veis, no me queda más remedio que exonerar a de Vere. Y no sólo por eximirme en parte del pecadillo cometido, ni siquiera como muestra de agradecimiento por permitirnos satisfacer las intrigas expuestas. El joven Juan, que cuando nos narra esta historia ya no es tan joven, no nos la cuenta por chismoso, no es esa la razón que le impele a desvelar secretos pasados. Y si vosotros queréis conocer el motivo por el que nos hace cómplices de tantas intimidades veladas, tendréis que leer este libro, y deberéis hacerlo hasta el final. Yo ahora cierro mi pico, que una cosa es ser cotilla y otra bien diferente, reventar novelas.Vuelvo ahora al inicio de esta reseña, a esa prosa de Marías en la que perderse, en la que abandonarse con grata satisfacción. "Así empieza lo malo" transcurre en el Madrid de 1980, en un país de libertad estrenada con una democracia recién instaurada. Son muchas las reflexiones que el autor nos plantea sobre el comportamiento de los españoles en esos años y en los precedentes, así como también lo son sus circunloquios sobre el amor, el deseo, la traición, la culpa, el perdón. Y así nos enreda, así nos envuelve, así nos va presentando la trama y sus personajes, y cuando queremos darnos cuenta ya nos ha embaucado, ya estamos atrapados en sus páginas, incapaces de salir de ellas, al igual que Juan de Vere es incapaz de desvincularse de esas vidas ajenas que sin sospecharlo van a tener tanta incidencia en la suya propia.
Pero si hay un tema crucial y que Marías sabe tratar con maestría en esta novela, es el tema de la verdad: la verdad con minúsculas. La Verdad con mayúsculas es aquella que presenciamos, esa a la que tenemos la suerte o desgracia de asistir, ese estar en el momento adecuado en el lugar adecuado. Lo demás, ¿qué es? ¿Cómo tener la certeza de que un rumor es cierto por mucho que resuene si no se ha sido testigo de él? Pero una vez que nos llega, ¡qué difícil es escapar de su poder corrosivo! Y aunque supiéramos que es cierto, ante algo ya pasado, ¿qué hacemos? Yo, que siempre he sido una gran defensora de la verdad aunque también soy consciente de que mucha veces está sobrevalorada, tal vez con los años he aprendido a defender más la 'no mentira', así como también aprenderán Muriel y Juan en esta novela. ¡Pero es tan complicado decidir! Hablar o callar, ¡si pudiéramos saber de antemano las repercusiones de nuestra decisión! Quizás la solución sea más fácil de lo que pensamos, quizás consista sólo en hacer lo menos malo, en plantearnos la respuesta a esta pregunta: ¿le hace bien a alguien esa 'verdad'? Y vosotros, pajaritos, decidme, ¿qué elegís? ¿Calláis y empezáis así lo malo, o habláis y dais con ello paso a lo peor?
"Cuando uno renuncia a eso, cuando uno renuncia a saber lo que no se puede saber, quizá entonces empieza lo malo, pero a cambio lo peor queda atrás."
Mirilla 2 (el ojo). Fotografía de Las fotos de é
Ficha del Libro:Título: Así empieza lo maloAutor: Javier MaríasEditorial: AlfaguaraAño de publicación: 2014Nº de páginas: 540Más sobre "Así empieza lo malo"
Os dejo un enlace en el que podéis disfrutar de un fragmento de esta excelente novela y también un vídeo con la entrevista que Javier Marías concedió al programa 'Página 2' de TVE con motivo de la publicación de "Así empieza lo malo".
Fragmento de "Así empieza lo malo"
Entrevista a Javier Marías en 'Página 2'
Y el próximo viernes... volamos hasta Brooklyn y acompañaremos a un hombre que se instalá allí para morir pero que paradójicamente se reencontrará con unas enormes ganas de vivir. "Brooklyn Follies" de Paul Auster.