Sobre el final del primer tiempo ya Barcelona había empezado a superar la numerosa defensa del Real Madrid, Iniesta, Alves, Abidal, y Fábregas desbordaban cada vez más cerca del arco, sumado al cansancio del rival producto del desgaste normal en un equipo que no descansa con la posesión, cuyos defensores llegaban a rechazar con lo último de los recursos que le quedaban.
El segundo tiempo se iba a dar ya con total control del Barcelona arrinconando aún más al Madrid que siquiera podía salir de contra. Pero eso lo veremos más tarde. O, mejor dicho, yo lo veré más tarde teniendo en cuenta el escaso interés que ha despertado en la población este análisis. ¡No lean tanto esta entrada que se bloquea el servidor!.