Eso si, no voy a abandonar la ‘gestión de personas’ como hilo conductor de esta entrada.
¿Quién, me pregunto yo, ha sido el propulsor de la web estoloarreglamosentretodos.org?
Cuando me ha llegado el enlace por canal de twitter me pareció interesante y lo pinché. Y ahora que me paro a pensar y a escribir estas palabras, no se lo que me pasó por la cabeza primero, una alegría o una tristeza (por no decir verguenza).
Y me voy a explicar para que no haya mal entendidos.
Que un grupo de personas se movilice para intentar con buena voluntad dar una visión de la crisis en la que estamos sumergidos más esperanzadora, me parece muy digno, honesto y me quedo sin adjetivos positivos para describir la campaña.
Ahora bien, tras medio minuto viendo la web, me ha invadido cierto grado de malestar y enojo que ha ido ‘in crescendo’ hasta el punto de que me he visto obligado a escribir este artículo.
¿Pero qué me están vendiendo a mi con esta web? ¿Qué entre todos solucionamos esto?
Está claro que esta actitud es la necesaria en toda adversidad de la vida y para esta crisis por supuesto, pero digo yo, ¿para qué estoy pagando con dinero de mis impuestos a 72.000 políticos que hay en este país? ¿Para qué tenga que hacerles yo su trabajo?
Porque yo creo que no hay un sólo político en este país que no viva bien, y me refiero bien a la remuneración y sobre todo a la relación productividad/hora de trabajo/sueldo.
Me gustaría que los promotores de esta web fueran a la cola del INEM todos los días y se lo comentasen a la gente que hay en la cola. Es más, si quieren les digo donde a las 10 de la noche en la localidad donde yo resido, van dos familias al contenedor de un supermercado a recoger los desperdicios del día. ¡¡Ahí quería verlos yo diciendo que entre todos solucionamos esto!!
¿Qué la actitud para salir adelante es algo necesario?, por su puesto y por eso me parece loable en un pequeño porcentaje de esta iniciativa.
Ahora bien, como yo escribo de líderes en este blog y lo que está claro es que cada uno debe de liderar a pequeña escala su vida y su entorno, como mi buen amigo Agustí Brañas ha hecho recientemente. Debemos de ser líderes anónimos e intentar hacer lo mejor para nosotros y contribuir a lo mejor para nuestro entorno, pero lo que no me parece justo es que se intente cargar a nuestras espaldas el trabajo que no es nuestro.
Nadie me paga a mi 80.000 euros al año, beneficios sociales y privilegios aparte, por intentar solucionar la vida de mis compatriotas, no es mi cometido. Es de quienes han asumido esta responsabilidad, ‘los políticos’.
Si se ven incapacitados hay muchísima gente en la cola del paro que podría hacerlo mejor, no me cabe duda, pero resulta más cómodo promover acciones de este estilo que intentan repartir la responsabilidad entre los que al final son las verdaderas víctimas de un sistema mal gestionado por ellos.
Lo sé, hoy estoy cargado de negatividad, pero es que hoy se han publicado los datos del paro de febrero y esta vez 82.132 personas se han ido a la calle. Y servidor está entre ellas