Así soy yo y punto!

Por Lachefdeprovenzal

"Así soy yo y punto"
Hace varios meses he venido meditando sobre esta frase tan usada por nosotras las mujeres, casi siempre el escenario donde aparece suele ser una discusión o un enfrentamiento de ideas donde sentimos que lo que se nos dice nos deja en un completo estado de vulnerabilidad frente al otro.
Crecemos en una sociedad donde nos enseñan a no "dejarnos" de nadie, a hacer valer nuestras opiniones, sentimientos y decisiónes por encima de cualquier cosa incluso por encima de una persona, el problema es que no nos enseñan como hacerlo, es decir nos dicen la teoría nos mandan al ruedo y a ver como no, por lo general vamos formando nuestro sistema de defensa batalla tras batalla, herida tras herida, sufrimiento tras sufrimiento y esto por lo general nos lleva a crear un estandarte de guerra que dice "Así soy yo y punto".
Debo reconocer que ese fue mi estandarte durante muchos años, en cada situación que sentía como amenaza sobre todo emocional y que sabía que me podía poner en "desventaja" frente al otro sacaba mi frase estandarte y con eso creía que el dardo había sido detenido a tiempo - uffff que salvada-, yo ya estaba lista para atacar ahora, después de decir esa frase y aunque termina en un punto rotundo seguimos listas para lanzar el siguiente argumento en defensa.
Recordemos un episodio en la Biblia que se encuentra en Génesis 3:1-5, en este texto leemos que hay una serpiente que era mas astuta que todos los animales del campo, y adivinen a quién se dirigió?, pues si, a la mujer y le dijo: "¿Conque Dios os ha dicho: No comáis de todo árbol del huerto?", la mujer inocente le dijo lo que Dios les había ordenado, que podían comer de todos los árboles del huerto menos del fruto del árbol que estaba en medio de él, esto con el fin de no  morir, evidentemente la serpiente era más astuta incluso que la mujer y le dijo a Eva: "No moriréis; sino sabe Dios que el día que comáis de él, serán abiertos vuestro ojos y seréis como Dios sabiendo el bien y el mal". Nuestra Eva pensó en todo lo bueno que sería ser sabia y codició y deseo eso con todo su corazón y comió y no solamente eso le dio a su marido para que comiera también.
Cuando usamos nuestra frase estandarte no solamente caemos en el engaño de creer  que somos perfectas y sabias, nos llevamos mucha gente enredada en el camino, esta frase termina siendo una gran mentira en nuestras vidas, es un engaño de la serpiente que nos aleja no sólo de nuestros seres queridos o amigos, también de Dios.
Las mentiras del mundo siempre prometen grandes beneficios y nosotras solemos creerlas y luchamos por ellas hasta el final, sin saber que las únicas engañadas, tristes y derrotadas seremos nosotras mismas, detrás de "así soy yo y punto" se esconde una gran incapacidad por parte de nosotras de escuchar, cambiar y transformar un error en algo positivo que podría cambiar nuestra vida.
No se trata de "dejarnos" del otro se trata de reconocer nuestro y error y cambiarlo, es un acto de amor por nosotras mismas que a la final también termina siendo un acto de amor por el otro, reconocer nos permite crecer y verdaderamente seremos sabias.
Excusas para dejar esta frase hay muchas por que realmente es un escudo de guerra buenísimo, pero atreverse a vivir una feminidad diferente requiere también que busquemos siempre la paz, que seamos mediadoras en tiempos de guerra, que seamos guerreras si claro, pero luchando por lo que construye y no por lo que destruye.
Las invito a que si usan esta frase "Así soy yo y punto" dejen de hacerlo y más bien las invito a pensar en una frase que no las destruya, más bien que las construya como mujeres de cambio, mujeres contra-cultura, mujeres diferentes que dejan marcas positivas en los otros, marcas de amor, comprensión y aceptación. Yo pensé en esta:                    
                                                                  "Puedo ser mejor".
Que frase se te ocurre para cambiar tu estandarte?
Si quieres puedes compartirla en los comentarios para que empecemos entre todas a vivir una feminidad diferente!
Bendiciones