A veces pienso que Guardiola ha renunciado a parte de su filosofía, que la obviedad lo ha conducido a la realidad, sin tener que pasar por lo aprietos de la necesidad. También he llegado a pensar que, como ese acertante de la Primitiva, ha tenido la fortuna de colocar los nombres adecuados en sus respectivos huecos. Que ha encajado las seis caras de su cubo alemán. Sí, a pesar de todo, a pesar de las evidencias, a pesar de la fastuosidad y las repeticiones a cámara lenta, sigo buscando una excusa para no elogiar lo indiscutible. Pobre de mí, pobres uñas ultrajadas.El Cotidiano
A veces pienso que Guardiola ha renunciado a parte de su filosofía, que la obviedad lo ha conducido a la realidad, sin tener que pasar por lo aprietos de la necesidad. También he llegado a pensar que, como ese acertante de la Primitiva, ha tenido la fortuna de colocar los nombres adecuados en sus respectivos huecos. Que ha encajado las seis caras de su cubo alemán. Sí, a pesar de todo, a pesar de las evidencias, a pesar de la fastuosidad y las repeticiones a cámara lenta, sigo buscando una excusa para no elogiar lo indiscutible. Pobre de mí, pobres uñas ultrajadas.El Cotidiano