Assassin’s Creed la Hermandad. Análisis

Publicado el 16 febrero 2011 por Portalgameover

Assassin's Creed la Hermandad / Ubisoft Montreal / PS3 - Xbox360

El mundo del Marketing de videojuegos es un terreno completamente desconocido para un servidor, del que jamás entenderé sus lógicas y razonamientos.
Y es que por alguna razón que todavía a día de hoy no entiendo, y seguramente seguiría sin entender por mucho que me la explicaran, alguien decidió vender “Assassin’s Creed la Hermandad” como una suerte de spin-off ambientado en el contexto de la segunda entrega y focalizado al juego online entre colegas. Solo hay que ver los anuncios, el slogan, hasta la misma portada… En su presentación de prensa en Madrid, a nuestra querida Nekochan solo le vendieron esa idea.

No lo entiendo, ni lo entenderé, porque eso es faltar descaradamente a lo que es en realidad “Assassin’s Creed la Hermandad”. Todos creíamos que sería un juego orientado al Online, con alguna tontería, alguna pequeña campaña de relleno para un jugador…
Pero nada más alejado de la realidad; pese a su título, pese a no cambiar periodo histórico ni protagonista, “La Hermandad” es en primer lugar una gran campaña para un jugador, con un modo Online como regalo extra, y no al revés; y en segundo lugar una más que merecidísima tercera entrega de la saga de Ubisoft.

Esta vez Ezio se ha traido a unos coleguillas.

Una saga a la que los más veteranos seguidores del programa ya saben que siempre he tenido un cariño especial, y que no en pocas ocasiones la he defendido a capa y espada de los muchos envites que ha recibido desde su primera entrega hace ya cuatro años.
Envites en ocasiones muy duros, muy agresivos; y de los que puedo entender su origen, su concepción… pero no su forma.
Sigo sin comprender porque esta saga sigue despertando tantos odios, y tantos surgidos por evidentes prejuicios… Y es que ya son muchos aquellos que erróneamente han criticado su segunda parte, o incluso esta secuela de “La Hermandad”, sin haberlas jugado dando por hecho que serían como su primera entrega.

Evidentemente, por mucho que me gustasen los dos primeros Assassin’s Creed, obviando los spin-off en portátiles, es de recibo reconocer que tenían sus fallos.
Por eso es tan importante “La Hermandad”, pese a que Ubisoft parezca que lo venda como un juego menor. Éste soluciona todos los problemas que se podían achacar a la saga, lo que la convierte en la mejor entrega con diferencia de ésta.
¿Y por qué? Hagamos un pequeño ejercicio de crítica respecto a las precuelas.
¿Cuál fue el posiblemente principal error del primer Assassin’s? Seguramente que era repetitivo y dejaba demasiada libertad al jugador. Perdiéndose éste, tanto por el camino como por los objetivos marcados.
¿Y del segundo, la reciente precuela? Pues seguramente que era demasiado largo, se perdía el hilo principal con misiones de chichinabo y acababa por perder todo el interés.

Assassin’s Creed la Hermandad tiene una variedad de misiones muy grande, elevadísima, pero solo obliga a cumplir aquellas misiones con cierta relevancia en la historia… Las demás son puramente opcionales, permitiendo al jugador si quiere profundizar en ellas o no.
Y además, pese a ser un evidente sandbox, lo que permite al jugador una libertad total, el juego siempre consigue, si así lo deseas, llevarte de la manita sin que se note deliberadamente.
Vamos, que con par de arreglillos y ajustes de tuercas, Ubisoft Montreal ha conseguido en mi opinión refinar un producto que ya tenía de por sí una excelente base.
Una magnifica base argumental, jugable y gráfica, que en el fondo repite exactamente el mismo planteamiento de sigilo, agilidad y lucha de las precuelas.

Ezio tiene ya una edad, pero sigue sin jubilarse, emperrado en dar saltitos por doquier.

Quiero recalcar que “Assassin’s Creed la Hermandad” es más que un simple spin-off como las adaptaciones a portátil, que realmente no aportan nada a la historia. La Hermandad es una evidente tercera entrega, pese a que no figure por ninguna parte ese numero tres.
Pero por desgracia, por culpa de ese inexplicable marketing, casi dejamos escapar la autentica tercera parte de una de las mejor escritas sagas de videojuegos del siglo veintiuno.

He de reconocer que yo tenía mis dudas; y es que tras jugar a Assassin’s Creed II, uno podía llegar a la evidente conclusión que no había nada más que contar de Ezio Auditore, su protagonista, al cual ya se le había sacado toda la chicha posible.
Nos dijeron en su momento que esa campaña empezaría justo después del final de la segunda parte; y vaya si no exageraban.
La acción empieza escasos segundos después del magistral final de la precuela; ese final del que ya os he contado en alguna ocasión que el día que un periodista sensacionalista quiera liarla, las polémicas causadas por “Doom” o “Modern Warfare 2” serán monjitas de la caridad en comparación.

Assassin's Creed, haciendo el hereje desde 2007...

Con tal, la acción sigue sucediendo en esa Italia renacentista, pero esta vez focalizada en Roma, ciudad que en la precuela solo se visitó de forma anecdótica.
Como en las precuelas, el reflejo histórico es impoluto, soberbio, enorme… Y la Roma renacentista brilla en todo su esplendor; y os lo dice alguien que estuvo allí este pasado verano.
Basta con subir a una torre elevada, para disfrutar de la capacidad de uno de los motores gráficos más sorprendentes de nuestra era, capaz de reproducir enormes superficies sin nieblas ni ningún truco gráfico barato.
Es sobrecogedor como lo era antaño, y lo sigue siendo hoy.

Claro está que gráficamente nada ha cambiado demasiado desde la precuela… Uno podría decir ya no solo que estamos ante un reaprovechamiento evidente del motor de la precuela; sino que lo estamos ante el mismo motor de la primera entrega con cuatro mejoras palpables.
¿Criticable? Puede. Pero no se puede negar que este motor ya cumplía con creces los objetivos de un juego así hace cuatro años, y los sigue cumpliendo sobradamente; aunque si es verdad que una revolución gráfica palpable para una próxima entrega, no le haría ningún mal.

El consejo regulador de turismo de Italia bien podría hacer unas cuantas menciones al trabajo de Assassin's Creed.

Vamos, que os soy sincero, no tengo mucho que criticar a La Hermandad. Es un juego redondo, pulido y repulido, completo de principio a fin.
Y encuentro excelente esa capacidad que tiene de siempre llevarte disimuladamente de la mano en su argumento, y al mismo tiempo ofrecerte una libertad de movimientos total.
Sí que es cierto que puede tener altibajos en su historia, en su argumento, pero no se puede negar que a nivel jugable La Hermandad es un juego excelente.

Un título que remarco, no es un juego Online; es una magnifica tercera entrega de una saga, a la que enriquece con nuevos mitos y misterios. Su final es tan enorme como lo fueron los de sus precuelas, dejándonos con esa ansia incontrolable de una nueva entrega cuanto antes…
Os soy muy sincero en este aspecto; es totalmente loable y licito criticar los fallos tanto de esta entrega como de las precuelas; pero la calidad del argumento tras todo el mito Assassin’s Creed es de lo mejorcito que hay en la industria actual, y eso es innegable. Comparo su calidad, no alegremente, con lo que supuso Metal Gear en su día, juegos argumentalmente grandes por si mismos, pero que unidos forman una leyenda magistral.

Ezio sigue liándola alegremente (y enseñándonos Italiano de la calle)

Por todo esto y más, me sabe tan mal que tanta gente prejuzgue este título… Tanto por su marketing, que lo reconoce como un título menor en la saga, como por aquellas ideas preconcebidas que nada ha mejorado desde su génesis.
Y es que nadie puede negar, aficionado o no a la saga, que éste es uno de los mejores títulos del año 2010.

Un título que nos han vendido como un juego básicamente Online. Y que es tan bueno, tan absorbente, que da tanto de sí, que en el par de semanas en el que estuve jugando, apenas probé el juego Online, su supuesta gran baza.
Es un modo que reconozco apenas he probado… No solo porque no fuera mi principal interés ni porque tuviera muchos amigos con quienes compartirlos… Simplemente me dejé llevar por la grandeza de esa olvidada campaña para un único jugador.
Por eso, prefiero que sea alguien como Neko, en su articulo dedicado a tal efecto, o Jony, al que cedo unas líneas en este articulo, quienes os hablen de él.

Desgraciadamente mucha gente seguirá criticando y dejando a un lado este título por razones que no consigo entender; su propio Marketing no hace mucho por mejorarlo ya que estamos.
Pero que quede clara una cosa, un servidor, tras semejante experiencia, no puede esperar a hacerse con la cuarta entrega; y es que eso es lo que será, su cuarta parte, por mucho que un gran y flamante número tres adorne su portada.


El modo Online, emulando a Locomía con los colegas.

Modo mutijugador.

Como bien indica Funs en su análisis, este juego nos lo han vendido, inexplicablemente, como un multijugador. Mientras goteaban las noticias, todos, sin excepción, pensamos que el titulo no era mas que una excusa para colarnos un multijugador innecesario que nadie había pedido.

Y como bien dice Funs, es incomprensible que publiciten el titulo de esa forma, cuando tiene un multijugador mediocre comparado con su modo historia.

Básicamente es un “corre corre que te pillo” ente distintos asesinos, solos o por equipos, con los “PERKS” al subir de nivel que están tan de moda, pero que necesita muchos ajustes para funcionar.
La idea es buena:  se nos asigna un contrincante y debemos ir a por el en un mar de personajes clonicos que “dificultan”, entre mil  comillas, localizar a nuestro objetivo. Mientras, obviamente, somos objetivo de uno o varios jugadores mas.

Como digo la idea es buena, pero falla la ejecución. Las “comillas” que comentaba antes se traducen en un indicador que nos indica claramente nuestro objetivo cual GPS supervitaminado, reduciendo la posibilidad de equivocarnos a las prisas con el control. Y lo que debería ser un juego de astucia y ocultación entre personajes gemelos, se convierte en un montón de personajes clonicos paseando por el escenario y 6 jugadores corriendo por el mapa y los tejados.

Aun así, a pesar de estos palos que acabo de darle al multijugador, es entretenido, y aunque dudo que Ubisoft lo parchee para pulirlo, da para partidas ente grupos de amigos, donde pueden salir muchas risas si se toma como lo que es, un juego pachanguero para disfrutar con colegas, un “pilla pilla” para reír entre amigos. Pero siempre como un añadido, algo que no esta de mas para disfrutar y que dependiendo de la compañía, puede ser muy divertido.(JonyBCN)


Puntuación: Imprescindible