Tendría que buscar mirándote el rostro,como miro los mapasubicando siempre por donde viajarte.
No quiero que limpies con olvidola dicha transparentela longitud de díasque cabían en el puño apretado de nuestra alegría.
Ya trabajando, ya leyendo,nos buscábamospara hacer el fuegoy germinar ataviados de libertad.
Ahora al llamartetu corazón marca ocupado.Y mi sombrarendida ante la vidaha cortado los tallos que nos unían.