De acuerdo al relato de la víctima, una enfermera que pertenece a la Unidad de Medicina Familiar No 47, iba caminando por el citado barrio con su uniforme cuando fue violentada por dos hombres quienes se le acercaron primero para asaltarla, pero no conformes únicamente con el asalto, también le golpearon y expresaron que justificaban sus actos debido a que ella era una fuente de contagio al tratarse de una enfermera.
Con mucho coraje, miedo e impotencia, a la enfermera no le quedó más que llegar a su trabajo donde reportó a sus superiores la situación, sin embargo no recibió el apoyo institucional adecuado por parte del IMSS. La enfermera tuvo que ser incapacitada unos días debido a que tenía dolor en las lesiones que sufridas.
En SLP, no se conoce de alguna persona que haya sido consignada por este tipo de agresiones, por lo que se habla completa impunidad, por lo que médicos y enfermeras están solicitando mayor apoyo por parte de las autoridades.